Diario de León

Casi 10.000 son para Zapatero, 8.000 para Rajoy y el resto para los candidatos locales

Los partidos buscan esquinas para pegar 100.000 carteles esta semana

Oficialmente el coste de la campaña electoral será de sólo 209.000 euros

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Antonio Núñez - león
León

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Más de 105.000 carteles electorales empapelarán materialmente estos dias las calles, esquinas y fachadas de toda la provincia para pregonar los programas de los cuatro partidos políticos mayoritarios, PP, PSOE, UPL e IU, que siguen apostando por este tipo de propaganda a pesar de la escasa eficacia que se les concede en las campañas modernas frente a los debates en los medios de comunicación. Paradójicamente es la UPL, el tercer partido en votos dentro de la provincia, el que encabeza el número de carteles callejeros, con un total de 45.000, seguido a grandistancia por el PSOE, que dedicará 10.000 a difundir la imagen de su líder paisano, José Luis Rodríguez Zapatero, y 22.000 más para dar a conocer a los candidatos locales, encabezados por el juez José Antonio Alonso, que acaba de aterrizar en León desde Madrid para un viaje de ida y vuelta, esta vez al congreso. En cuanto al PP, Mariano Rajoy tendrá en León 8.000 carteles, los mismos que el candidato al Congreso, el ya diputado y exalcalde Juan Morano y el igualmente exalcalde, Mario Amilivia, que lidera la lista al Senado. Mucho más parcos en cartelería son los dirigentes de la campaña de IU-PCE, a los que el presupuesto sólo les da para 3.000 pasquines, todos ellos con la imagen del líder nacional, Gaspar Llamazares y ninguno con el de los candidatos de la provincia, como Germán Fernández para el Congreso y Guillermo Murias para el Senado. Según los responsables de esta coalición no hay dinero suficiente para diversificar la cartelera, de modo que IU tendrá que limitar su campaña a promocionar a su lider nacional, aprovechando, sobre todo, los espacios gratuídos en los medios públicos de comunicación, entre otras cosas porque alcanzar un diputado en la provincia leonesa resulta un sueño casi imposible. De todas formas IU ha convocado un total de catorce mítines, al ritmo de uno por día, en las zonas de mayor implantación de su electorado, fundamentalmente en las zonas mineras. La UPL, a tope No menos paradójicamente la UPL será el partido con mayor número de carteles electorales en la provincia, a pesar de ocupar el tercer puesto en el ranking de votos: 45.000 pasquines en total, integramente dedicados a dar a conocer a sus candidatos locales, porque otros no hay, con el alcalde de Toreno de Sil,. Pedro Muñóz, como cabeza de cartel al Congreso. Los leonesistas tienen previsto dar también un total de 25 mítines, casi dos diarios durante la campaña. En cuanto a presupuestos y gastos, la campaña electoral supondrá, como mínimo, en la provincia de León 209.000 euros, sólo entre los cuatro partidos antes citados (el equivalente a 35 millones de las antiguas pesetas), aunque resulta difícil sumar las cantidades adicionales que llegan desde Madrid y que no se contabilizan. Así, el PP asegura tener un presupuesto provincial de 77.000 euros para la campaña, según una de sus coordinadoras, Nieves Porto, que deben dar también lo suficientemente de sí como para organizar 47 actos públicos en toda la provincia, aunque no se cuente el buzoneo de cartas a los electores, que se realiza directamente desde Madrid. Del mismo modo el PSOE dice contar a nivel provincial, según su coordinador de campaña, José Giménez, con 51.000 euros para gastos generales y 41.000 más para buzoneo, en tanto que la UPL, a pesar de tener una implantación exclusivamente provincial, asegura disponer de 75.000 euros (12,5 millones de las desaparecidas pesetas), a repartir entre carteles, cuñas publicitarias, correos a sus electores y un total de 25 mítines en las zonas de mayor implantación. El partido pobre de la provincia, entre los mayoritarios, es IU, que deberá administrar cuidadosamente apenas 6.000 euros (un millón de pesetas) y limitar su campaña a zonas donde antaño tenía un amplio coto electoral, aunque ahora un tanto menguado, como las cuencas mineras. Los antiguos comunistas confían en mantener su presencia en votos, aunque sea meramente testimonial, sobretodo en Villablino y el Bierzo.

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