Los gritos de Lucas

El reparto de cargos parlamentarios no fue fácil para el nuevo líder del PP, quien tuvo que plegarse a las exigencias de Juan José Lucas, que se negó a presentarse como candidato a la reelección, consciente de que no obtendría los votos necesarios al haber rechazado su partido el pacto con el resto de los grupos para el reparto de los puestos en los órganos de dirección. La candidata a presidenta del Senado por el PP será Rosa Vindel, que sólo resultará elegida si se equivocan o ausentan cuatro parlamentarios de los demás grupos y siempre que todos ellos voten por la misma propuesta alternativa a la de la senadora popular. Si Lucas aceptaba postularse como presidente perdía la posibilidad de ser elegido vicepresidente. Fuentes cercanas a ambos interlocutores coinciden en que la discusión entre Lucas y Rajoy, en presencia de los portavoces de los grupos parlamentarios, fue muy agria porque el todavía presidente del Senado criticó, en términos muy duros, el resultado de las conversaciones con el PSOE, se quejó de haber sido apartado de las negociaciones, de las que no se le informó y con las que estaba en profundo desacuerdo. En medios populares de la Cámara alta aseguran que Lucas se enteró por los medios de comunicación de que el diálogo con los socialistas estaba irremediablemente roto y que había fracasado también el intento de buscar el apoyo de Coalición Canaria para que el Senado tuviera un presidente del PP. Así que Lucas fue tajante ante la propuesta de Rajoy pero no tuvo inconveniente en optar a la vicepresidencia de la Cámara que presidió.