Las víctimas acusan

El juez Juan del Olmo autorizó desde el pasado mes de mayo a más de 500 familiares de víctimas y supervivientes de la masacre del 11-M a constituirse en acusación particular durante la instrucción del sumario y la celebración del juicio contra los terroristas que realizaron los atentados. El titular del Juzgado Central 1 de la Audiencia Nacional hizo el ofrecimiento de acciones penales a las familias a través de la Unidad de Apoyo a las Víctimas del 11-M, órgano dependiente del juzgado y creado en mayo para completar el expediente judicial de cada uno de los afectados y asesorarles en trámites legales y en el cobro de indemnizaciones. Esta unidad esta ubicada en una sede distinta a la del juzgado y atendida por tres médicos (forense, traumatólogo y psiquiatra), un psicólogo, un secretario judicial y cinco funcionarios judiciales. Citará hasta concluir su trabajo, uno a uno, a todos los familiares de fallecidos, a los heridos -primero leves y después graves- y, finalmente, a todos los que padecieron daños materiales como consecuencia de la explosión de los cuatro trenes de cercanías. Su objetivo fundamental es elaborar un expediente judicial de cada una de las víctimas y perjudicados para que puedan acogerse a las ayudas que otorga la Subdirección General de Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior. Estas son un anticipo de las compensaciones que pueden establecer los tribunales en sentencia, que se calcularán de acuerdo a las mismos informes. Los expertos también orientan a los perjudicados en el tipo de acciones legales que tienen derecho a emprender -como la acusación particular- contra los imputados. La Unidad de Apoyo ya ha ofrecido la presentación de acciones legales a 539 personas y ha concluido 180 de los informes de muertos en la masacre. La razón de que 11 de los expedientes de fallecidos estén sin concluir es que se trata de víctimas extranjeras -rumanas, búlgaras, peruanas, hondureñas y ecuatorianas- que, o bien sus herederos no han otorgado aún poderes a terceros para representarlos, o bien los familiares todavía no se han podido desplazar a España como es su intención. Tres casos dudosos Esta oficina judicial también tiene ya terminados 104 expedientes de heridos. El médico forense ha reconocido desde mayo a 201 heridos, de los que 101 recibieron el alta -con secuelas o no-, 94 están pendientes de una nueva revisión y en tres casos no se ha probado con claridad que las lesiones que padecen guarden relación con su presencia en los trenes atacados, por lo que están pendientes de un nuevo informe. Los diez trabajadores de la unidad lograron también localizar 68 objetos de víctimas reclamados por 18 familias y realizan gestiones para resolver 221 búsquedas. La unidad de apoyo judicial, inspirada en la experiencia puesta en marcha en los años ochenta para instruir el escándalo por el consumo de aceite de colza adulterado, funciona desde el 10 de mayo de 2004, de lunes a viernes, de 9:00 a 14:00 horas, en la calle Marqués de Duero de Madrid y tiene como teléfonos de consultas el 91 1026356 y el 91 1026362. Los trabajadores deben acreditar en cada uno de los informes las identidades y el parentesco de los familiares de los fallecidos, la condición de víctimas de los heridos y su grado de afectación física o psíquica.