Diario de León

Rajoy impone la «ley del silencio» sobre Piqué a todos los cargos El PP anuncia que «no hay tregua para la oposición» ni siquiera en las vacaciones de verano

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M. Iglesias M. Iglesias - madrid madrid
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La 'ley del silencio' impera entre los altos cargos del PP e incluso también se ha impuesto en el ámbito del grupo parlamentario, a donde han llegado las instrucciones de su presidente, Mariano Rajoy, para que nadie hable de la polémica generada por Josep Piqué y, por el contrario, se concentren todos los esfuerzos y declaraciones en criticar al Gobierno o denunciar las discrepancias internas en el seno del PSOE a propósito de las reformas estatutarias. Tras su conversación con Rajoy el lunes, Piqué llamó por teléfono ayer al secretario general, Ángel Acebes, y el portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana, para unas conversaciones de carácter «privado», como explicó el portavoz parlamentario popular. Las llamadas a ambos dirigentes era el gesto de reconciliación que la dirección del PP esperaba desde que Piqué se vio obligado a pedir explicaciones públicamente, tras la contundente desautorización de la que fue objeto por parte de su presidente por afirmar que ambos dirigentes evocaban del «pasado». Órdenes claras y directas En la reunión del comité de dirección, el pasado lunes, el presidente del PP pidió a los miembros de su equipo que no volvieran a mencionar el incidente protagonizado por Piqué y evitaran pronunciarse al respecto aunque los medios de comunicación insistieran sobre el asunto. El líder de la oposición señaló con claridad que «hay que hablar de otras cosas» para no hacer el juego a quienes intentan transmitir una imagen de división interna del partido. «Piqué metió la pata, ha pedido disculpas, ya sabe que se equivocó y no hay más que hablar. A ningún partido le interesa alimentar este tipo de polémicas», explicó una colaboradora del presidente «popular». El Partido Popular no dará tregua al Gobierno ni siquiera durante el descanso estival. El portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana, anunció que los diputados no disfrutarán vacaciones y seguirán trabajando durante el verano. El PP no aflojará su oposición al Gobierno. Los portavoces y portavoces-adjuntos del grupo popular trabajan en la preparación del nuevo curso político, que empezará en septiembre, y ayer celebraron su primera reunión de trabajo a la que seguirán otras a lo largo del mes de julio. «Estamos en el momento propicio para presentar iniciativas», dijo Zaplana, quien anunció la celebración del plenario del grupo parlamentario con Rajoy, el próximo jueves. «El Congreso no cierra», dijo y anunció que «la oposición no descansa en periodo vacacional» por lo que aseguró que el PP no renuncia a seguir proponiendo debates sobre asuntos de actualidad en los dos próximos meses. Zaplana hizo balance de la labor de oposición del grupo popular en el primer año de legislatura, a la que atribuyó un resultado «exitoso» al considerar que «cae la confianza» de los ciudadanos en el presidente del Gobierno y en su gabinete de diputados.

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