Diario de León

La larga huida de Armando

Uno de los supervivientes de Peña Laza sobrevivió en el monte hasta 1950, cuando, ya sin compañeros, fue ayudado por un vecino de Busdongo para ir a Vigo y de allí a Brasil con documentos falsos

León

Creado:

Actualizado:

Entre los milicianos leoneses que resistieron en Peña Laza hubo alguno que pudo escapar, como Armando Bayón, vecino de Busdongo, que había llegado desde el frente de Aralla. Anduvo huído por el monte con otros catorce hombres hasta que en 1950, se quedó solo. Sus compañeros habían ido cayendo uno tras otro. El último fue detenido y encarcelado. Aquel invierno, cuando se le cayeron las uñas de los pies del frío que había pasado decidió que ya no podía seguir en el monte. Según cuenta su sobrino, Rotilio Bayón, «un vecino de Busdongo, de derechas, aunque amigo de la familia», se prestó a sacarlo de la zona y conducirlo hasta Vigo donde el Partido Comunista de España le ayuda a salir del país rumbo a Brasil «con documentación de un muerto». Así fue que Armando vivió como Emilio hasta 1979. Aquel año, recuperada la democracia en España, decide regresar a su patria a intentar recobrar su nombre y su honra como combatiente republicano. Emilio retornó a Brasil como Armando, pues consiguió recuperar su identidad tras una gestión en la comisaría de León. Su partida de nacimiento, como la todo el municipio de Rodiezmo había perecido en el incendio del flamante consistorio de piedra durante la guerra civil. Entre las llamas, el pueblo de Rodiezmo perdió también la sede municipal, pues el gobierno franquista decidió trasladarla a Villamanín, donde permanece desde entonces. Los incendios, que se atribuyen a los milicianos republicanos en su retirada, también asolaron el caserío en Villamanín, en Santa Lucía y en pueblos como Canseco en los últimos días del frente. El caso es que Armando Bayón moriría en Brasil año y medio después de recuperar su nombre en León, lamentando que la democracia recién llegada no reconociera los servicios que prestó como miliciano. «Esta no es la democracia por la que luchamos», le decía a su sobrino. Armando había perdido, al caer el frente norte, a su hermano Herminio, entonces alcalde de Rodiezmo, que fue fusilado, al igual que otro hermano, Nemesio y a su padre. Luis, el vecino que ayudó a Armando a escapar, salvó de la prisión de San Marcos por aquel entonces a otro hermano, el padre de Rotilio. Amador Viñuela, tío por parte materna pereció fusilado en la collada de Cármenes. «Al único del otro bando que se mató fue a Adolfo Cañón, diputado provincial de la Ceda; y por uno mataron a 70 de varios pueblos».

tracking