La Fiscalía y el Poder Judicial investigan si hubo irregularidades en el caso Otegi
La controversia provocada por el caso Otegi entre el ministerio público y los jueces no amaina. La Fiscalía General del Estado y el Consejo General del Poder Judicial han ordenado abrir sendas investigaciones para llenarse de argumentos con los que defender la actuación del fiscal Fernando Burgos, quien retiró las acusaciones contra el portavoz de Batasuna, y el trabajo de los magistrados, quienes insistieron en la culpabilidad del procesado a pesar de tener que dictar su absolución. El departamento que dirige Cándido Conde-Pumpido ha reclamado a la secretaría general técnica un pormenorizado resumen de todas las actuaciones por parte de la Audiencia Nacional y del ministerio público desde julio del 2001. El entonces fiscal general, Jesús Cardenal, ordenara investigar las palabras de Arnaldo Otegi durante el entierro de la etarra Olaia Castresana en el cementerio donostiarra de Polloe. Conde-Pumpido se ha marcado como primer objetivo saber si se «ajusta a derecho» la sentencia de la Sección Cuarta de la Audiencia Nacional en la que los magistrados lamentaron que la Fiscalía hubiera retirado sus acusaciones pese a que, en su opinión, había «prueba de cargo directa, objetiva y suficiente». Por otra parte, el pleno del Consejo General del Poder Judicial aprobará mañana un texto de apoyo a los jueces de la Audiencia Nacional que absolvieron a Arnaldo Otegi, y en el que probablemente habrá críticas a la actuación de la Fiscalía.