La Ertzaintza se emplea a fondo paraevitar que radicales ensalcen a los presos

Efectivos de la Ertzaintza impidieron ayer que echara a andar en San Sebastián la manifestación a favor de los derechos de los presos de ETA que había sido prohibida por la Consejería de Interior del Gobierno vasco. Hasta primeras horas de la tarde se escuchaban en el Boulevard donostiarra, la Parte Vieja y calles aledañas los pelotazos de los ertzainas respondidos con pedradas, botellazos y gritos de radicales. Todo comenzó poco antes de las 13.45 horas, minutos antes de esa hora varios grupos de personas acudieron a la cita fijada por el denominado Movimiento pro Amnistía, una organización satélite de Batasuna, para manifestarse a favor de los derechos de los presos de ETA. Por la autodeterminación La marcha iba encabezada por una pancarta con el lema A utodeterminación y Amnistía , pero no pudo arrancar porque se encontró con una tupida barrera de 200 agentes antidisturbios de la Ertzaintza apoyados por un helicóptero. Los manifestantes avanzaron algunos metros, gritando lemas en euskera como «golpear hasta ganar», hasta toparse con el cordón de agentes antidisturbios, cuyos mandos, según señaló en una nota el departamento vasco de Interior, les recordaron que la protesta estaba prohibida y que debían abandonar el lugar. «En lugar de obedecer, arremetieron contra el cordón policial, lo que ha provocado la intervención de los ertzainas para disolverlos», agregó la consejería de Interior. Hubo unos forcejeos porque los concentrados se negaban disolverse y la Ertzaintza cargó contra los manifestantes, que respondieron con el lanzamiento de botellas, piedras, sillas y mesas de las terrazas que pueblan el Boulevard donostiarra. Los radicales y los policías se mezclaron con la multitud que ocupaba toda esa zona céntrica debido a la reciente finalización de la regata de La Concha, hasta el punto de que los vehículos que transportaban las traineras participantes tuvieron que abandonar el muelle en medio de los disturbios. Los enfrentamientos entre la policía y los radicales y grupos de encapuchados se prolongaron con intensidad hasta las tres de la tarde, aunque durante dos horas más continuaron las escaramuzas y el empleo de material antidisturbios por parte de la Ertzaintza. De toda formas, la Policía Vasca mantuvo durante varias horas su dispositivo en la zona, en previsión de que se produjesen los altercados o se perpetren sabotajes. Los disturbios de ayer fueron la reedición de los registrados el año pasado.