Zapatero se compromete ante Herrera a que el Estatuto se apruebe en noviembre

El proyecto de nuevo Estatuto de Autonomía de Castilla y León surgió del acuerdo entre los dos grupos parlamentarios mayoritarios en la comunidad y se aprobará en Madrid a partir de un consenso similar, según extrajo el presidente autonómico, Juan Vicente Herrera, de la reunión mantenida ayer en La Moncloa con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Esto quiere decir que las enmiendas que se incorporen antes de su aprobación en el Senado, que ha de ser en noviembre, según Herrera, tendrán ese carácter compartido en una negociación que «parte del esfuerzo, ante el que hay que rendir el honor que se merece, de los respectivos portavoces del PP y el PSOE, José Antonio de Santiago y Ángel Villalba», resaltó el máximo mandatario castellano y leonés. Enmiendas o correcciones, de tipo «lexicográfico» o de otra naturaleza, como definió Juan Vicente Herrera a esas incorporaciones al texto final, serán recibidas con respeto por el gobierno autonómico, pero siempre garantizando, como se abordó ayer en La Moncloa, y para lo que el presidente autonómico garantizó el compromiso de Zapatero, que «se mantendrá el espíritu y la letra del nuevo estatuto». «No hay otro escenario posible», dejó claro Herrera. Piropos de Herrera Que el estatuto va a salir adelante, con la propuesta inicial casi intacta, y en plazo, fue tratado ayer por los presidentes del Gobierno de España y de Castilla y León en un clima sobre el que Juan Vicente Herrera no reparó en piropos. Con Fernando Moraleda, secretario de Estado de Comunicación, en primera fila, lo cual Herrera agradeció, el presidente autonómico se congratuló por la «celeridad» con la que tuvo lugar el encuentro de ayer tras ser cursada su petición y por la «cordialidad» mantenida en una reunión que no calificó de protocolaria sino cargada de contenidos. Y muchos de ellos críticos, porque aseguró que «para Castilla y León esta legislatura presenta unos tonos decepcionantes», aseveró. Por todo ello, el Gobierno autonómico mantendrá, y así le fue comunicado a José Luis Rodríguez Zapatero, la exigencia de la rendición de cuentas de promesas electorales incumplidas, algunas de ellas precisamente en acuerdos de gobierno en el Consejo de Ministros celebrado en León y en otras conferencias de presidentes en donde han detectado múltiples incumplimientos. El plan Herrera, con las elecciones autonómicas ganadas este año, pasa porque el fin de la legislatura a nivel nacional no suponga que muchos de sus proyectos queden en agua de borrajas. Por ello, considera que la aprobación del estatuto resume el esfuerzo de dos años y medio de negociación y elaboración del texto y una reforma que permite desarrollar nuevos instrumentos de cooperación, aumentar competencias en materia de aguas, sobre todo el río Duero, como remarcó el presidente autonómico, y la reforma del modelo de financiación en términos de corresponsabilidad y solidaridad. El paquete de propuestas llevadas a La Moncloa por el presidente de Castilla y León se enmarcó en varios apartados. Al margen de la innovación tecnológica, el desarrollo rural y, cómo no, las infraestructuras de comunicación, el sistema de financiación y de la atención a la dependencia, punto en el que denunció importantes carencias en el proyecto estatal, formaron el grueso de las propuestas presentadas ante el máximo responsable del Ejecutivo central, José Luis Rodríguez Zapatero.