León recibe 23 millones para modernizar 23.000 hectáreas del Páramo Alto y Bajo

redacción

La modernización de los regadíos de la comunidad sigue marcando las relaciones entre Castilla y León y el Gobierno central en lo que a política agraria se refiere. Un nuevo convenio rige ahora la modernización y consolidación de hasta 60.000 hectáreas en la comunidad por valor de 514 millones de euros, que deberán ponerse a punto antes del 2013, tal y como rubricaron ayer el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, y la consejera del ramo, Silvia Clemente. Hasta entonces, Castilla y León unirá su inversión al dinero que recibirá de las arcas centrales, de Europa y de los bolsillos de las propias comunidades de regantes. Sin embargo, para poner en marcha de forma definitiva las actuaciones, aún habrá que esperar a la firma de los convenios específicos que concreten las obras a realizar por cada una de las administraciones.

Esta vez, el documento afectará a casi 23.000 hectáreas en la provincia de León, localizadas en dos zonas: el Páramo Bajo, con 13.000, y el Páramo Alto, con 10.000 . Para llevar a cabo ambas actuaciones se necesitarán un total de 23 millones de euros, de los que la mitad vendrán de Madrid y Bruselas, a cargo de la sociedad estatal Seiasa del Norte y los fondos Feader. El resto del montante le corresponderá a la Junta de Castilla y León en un 26% y casi en igual medida -”24%-” a las comunidades de regantes, que deberán hacer frente a una importante inversión de casi cinco millones y medio de euros. De hecho, para poder sufragar su parte, los propios regantes deberán pedir préstamos que les ayude a cumplir con su parte del trato.

Esta vez, el convenio recoge nuevos criterios medio ambientales, tal y como señaló Puxeu, que dejan atrás los tradicionales enfrentamientos entre «agricultores y ambientalistas». De esta forma, se espera que las nuevas obras ahorren un total de 120 hectómetros cúbicos en toda la comunidad y que se reduzca la emisión de contaminantes a la atmósfera. Además, las obras de puesta a punto de los regadíos redundarán también en el aumento de la productividad de las explotaciones agrarias y la rebaja de sus costes de producción.

Por otra parte, y siempre que sea posible, los proyectos de modernización contemplarán soluciones de optimización energética, incluso mediante la generación de energías renovables por parte de las comunidades de regantes, siguiendo con el objetivo medio ambiental planteado por Puxeu.

Por último, los proyectos incorporarán el riego presurizado con elementos de medición de los consumos, la gestión de riego por telecontrol y el sistema de comunicaciones y de software.