Aires de encanto y leyenda

Suelos de madera y paredes de piedra envolverán de tradición al visitante. La casa rural La Alberiza, que proporciona una sensación de calidez y tranquilidad sólo con una mirada, se levantó a partir de las ruinas de una construcción que, hace un siglo, era destinada a vivienda, cuadra y pajar. En la rehabilitación, en la que se utilizaron elementos acordes con el entorno, se aprovechó al máximo el espacio. Con un diseño tradicional omañés, tiene un patio interior ajardinado, escalera de patín y corredor típico de la zona. La casa, de alquiler completo, dispone de cuatro dormitorios (tres dobles y uno triple), distribuidos en dos plantas, baño en el que no falta ni un solo detalle, sala de estar con chimenea, salón comedor, aseo, cocina con todo tipo de electrodomésticos, porche, patio ajardinado y jardín con barbacoa. El número máximo de huéspedes es de diez personas, que disfrutarán de una finca de 3.000 metros cuadrados. Al calor de la chimenea en invierno y al relente de las noches en verano es el lugar perfecto para disfrutar del descanso y la tranquilidad.

La Alberiza se sitúa en Los Orrios, un pueblo del municipio de Riello, del que apenas le separa un kilómetro, y está a una altitud de 1.050 metros cuadrados. Una comarca declarada Reserva de la Biosfera por la calidad y conservación de su medio ambiente.

Un alojamiento en un valle de leyenda, de trazado longitudinal, formado por la cuenca del río del mismo nombre, que la cruza de oeste a este, y su gran peine de valles laterales. Una encrucijada de caminos que apenas conocen el asfalto, conforman el paisaje perdido que el caminante siempre añora.

Son muchas las actividades que se podrán disfrutar desde esta casa rural y que sus dueños, amablemente, facilitarán a sus huéspedes. De hecho, el entorno es perfecto para rutas de senderismo, bicicleta, a caballo, pesca, deportes náuticos, esquí o escalada. Además, los aficionados pueden disfrutar del deporte de la pesca en los ríos trucheros y sus aguas cristalinas. También, para los amantes del deporte blanco, está cerca la estación de esquí de Leitariegos. Además, los pueblos limítrofes como Pandorado, Rosales, Murias de Paredes o Piedrasecha despertarán la curiosidad de los visitantes. La estancia mínima es de dos noches y el precio del alquiler del fin de semana es de 500 euros.