Babia: la silueta del paisaje

4.En el año 2004, la Unesco catalogó Reserva de la Biosfera un total de 38.018 hectáreas de los municipios de Cabrillanes y San Emiliano, que aglutinan 28 núcleos de población y unos 2.000 vecinos. Un paisaje silueteado por Peña Ubiña, con una cima que supera los 2.400 metros. Se trata de una comarca modelada con el paso del tiempo, bañada por los ríos Sil, Luna y Torrestío, de tradición pastoril y ganadera surcada por sendas que ahora son objetivo de la curiosidad de los turistas rurales. En sus bosques habitan especies como el rebeco, el jabalí, el lobo, el murciélago, el alimoche o el gavilán, mientras que la flora se corresponde con la habitual de la región cantábrica. Su gastronomía, marcada por las bajas temperaturas de la zona, lleva a la mesa platos tradicionales pero manjares para el paladar: embutidos, hornazo, chanfaina, caldereta de cordero... Desde el punto de vista patrimonial destaca el conjunto histórico de la villa de Riolago de Babia, declarado Bien de Interés Cultural en el año 1989. Casas rurales y restaurantes se emplazan en los rincones más inhóspitos de esta comarca para deleite de los visitantes. Un paisaje único que emana serenidad y en el que se localizan numerosos puntos de interés geológico. Uno de los lugares más impresionantes se puede observar desde el puente de Las Palomas y es la captura del río Luna por el Sil.