Quince experiencias para los sentidos
El recorrido permitirá descubrir rincones con gran encanto. Es el caso de la Bodega Alberto Ledo, en Villafranca del Bierzo, una antigua fábrica de almíbares y conservas fundada en el año 1818 y que actualmente se ha rehabilitado para la elaboración, crianza y embotellado de vinos. En Cacabelos se encuentra un caserón solariego del siglo XVIII, donde Martín Codax encontró la perfección para Cuatro Pasos. En la elaboración de sus vinos, Bodega del Abad, ubicada en Carracedelo, une el conocimiento de expertos enólogos con las nuevas tecnologías y las técnicas más avanzadas para producir vinos blancos y tintos de la más alta calidad. Viñas del Bierzo está a punto de cumplir el medio siglo de historia. Una bodega que ha crecido pareja al esfuerzo y a la ilusión logrando un maridaje perfecto con la evolución del sector. Está situada en Camponaraya. La siguiente parada será en Bodegas Adriá (Villafranca del Bierzo). Sus vinos Vega Montán son la esencia de variedades Mencía y Godello autóctonas del Bierzo. Un sueño convertido en realidad ha dado como resultado Bodegas Estefanía cuyo estandarte es su marca Tilenus que ya ha traspasado fronteras. El recorrido se detiene en Bodegas Godelia, ubicada en Pieros, que nace del respeto por la naturaleza y el entusiasmo por la viticultura de la familia García Rodríguez. En Valtuille de Abajo se encuentra Bodegas y Viñedos Castro Ventosa que durante siglos ha mantenido la esencia de sus primeros cultivadores. Casar de Burbia, una bodega arraigada en Carracedelo, lleva décadas elaborando vinos de forma artesanal. Hasta San Román de Bembibre habrá que desplazarse para conocer la Bodega Dominio de Tares y sus vinos expresivos y elegantes. Regresando a Pieros encontramos Losada Vinos de Finca, una de las bodegas más innovadoras que ha apostado fuerte por el enoturismo. En Cacabelos está Bodegas Luna Beberide, un referente en la comarca berciana, por la unión de la sencillez, la calidad y la excelencia. No menos importante es el Palacio de Canedo, en Arganza, creado en 1989 y dónde prima el respeto a la tierra. Vinos con personalidad propia que han logrado sostener el entorno rural. Ahora van más allá formando parte de este proyecto de enoturismo. Dos bodegas más se han sumado a esta iniciativa. Pérez Caramés, ubicada en Villafranca del Bierzo, y Ribas del Cúa, en Cacabelos. En breve otras bodegas formarán parte de esta ruta del vino.