Diario de León

PARA VISITAR Y DISFRUTAR

La Bañeza, a todo pulmón

Comercio, cultura, patrimonio, gastronomía... y todo un año completo de propuestas son suficientes argumentos para que La Bañeza luzca los 365 días al año todo su esplendor. El de una ciudad viva que abre de par en par sus puertas al visitante para que este pueda disfrutar, como los propios vecinos, de un verdadero tesoro de sensaciones y buenos momentos. Para la vista, el paladar... La Bañeza está muy viva y lo demuestra en casa uno de sus rincones

RAMIRO

RAMIRO

León

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La Bañeza está muy viva. Y su corazón late con fuerza. El de una ciudad que aúna pasado, presente y futuro a través de su notable legado y de todas las propuestas e iniciativas que a lo largo del año mantienen viva la llama de una localidad que camina con paso firme.

Gastronomía, patrimonio, cultura, deporte... y así hasta un largo etcétera de propuestas que durante los 365 del año se convierten en el mejor latido para vecinos y visitantes para convertirla en un referente turístico de interior.

Convertida en la Plaza Mayor del norte de Zamora y el sur de León, La Bañeza puede presumir de contar con un legado al que se ha dotado de un valor notable. Sus iglesias de San Salvador o la de Santa María en pleno centro de la localidad son una buena prueba de ello. Sin olvidarse tampoco de la Casa Consistorial o el coqueto y vital Teatro Pérez Alonso que en estos años se ha convertido en un pulmón importante en el ámbito cultural con un amplio catálogo de actividades que abarcan todo el año.

La riqueza patrimonial también tiene su expresión y escaparate en otra serie de edificaciones, los museos, en los que se recogen multitud de vestigios y tesoros que han marcado y lo siguen haciendo la historia de esta localidad y sus comarcas. El Museo Imaginero o el de las Alhajas son dos de ellos así como el de la Alubia, sin duda alguna una fuente de riqueza y también escaparate de La Bañeza en el apartado gastronómico. El Centro de Interpretación de las Tierras Bañezanas es también otra de las joyas que el visitante puede disfrutar con su visita para conocer la esencia de la ciudad y todo lo que representa.

La Casa de Antonio Colinas, un literato que siempre hizo patria de su ciudad es también otro escenario que el visitante no puede perderse. Rincón por rincón La Bañeza tiene esas cosas, las de una ciudad con vida que sorprende al turista y que también es motivo de orgullo para los vecinos del municipio.

Y del patrimonio en forma de edificios y vestigios al gastronómico, una de las señas de identidad de una ciudad que puede presumir de contar con una amplia oferta y platos tan específicos como las ancas de rana. Sin olvidarse de las alubias, una fuente importante de economía y que tiene también además de la mesa y el plato otra forma de expresión y difusión con la Feria Agroalimentaria, cita que cada año no puede faltar en la localidad.

El vino es también otra de las joyas que se ha ganado poco a poco un lugar destacado. Amparado en la Denominación de Origen León los valles que rodean la localidad pueden presumir cada vez más de viñedos y vinos de una alta calidad que van desde los tintos Mencía y Prieto Picudo a los blancos con el Albarín y Verdejo como grandes referentes.

Y de la buena mesa y buen mantel a las propuestas lúdicas, festivas y deportivas que convierten a La Bañeza en un lugar no sólo de visita, también de disfrute. Y cada vez más ampliando la estancia.

Desde primeros de año hasta final el bullicio, la ilusión y la actividad tienen reservado su protagonismo en la ciudad. Empezando por las Navidades que unen el final de un año y el principio de otro y que engalanan la ciudad de color e ilusión, de innumerables propuestas y de un ambiente del que tanto niños como mayores participa. Y también el comercio que se vuelca en convertir a La Bañeza en el mejor escaparate posible con el Ayuntamiento como principal impulsor y motor.

Sin apenas tiempo para descanso, las carnestolendas tomarán la ciudad de norte a sur y de este a oeste durante algo más de una semana en la que el ‘otro yo’ toma el relevo al ciudadano del día a día para disfrazarlo de alegría con la imaginación como bandera. Son los carnavales de La Bañeza, una cita que se ha convertido ya en un referente nacional y un atractivo de un valor incalculable.

Las ferias son otro de los puntos fuertes a lo largo del año, tanto a nivel de alimentación como de otros sectores. Y qué decir de las fiestas patronales en pleno mes de agosto con una propuesta que supera ya las seis décadas de vida y que ha convertido a La Bañeza en la ciudad de las motos, el Gran Premio de Velocidad por el que han pasado auténticos campeones del mundo y nacionales y que ha llegado a congregar a más de 70.0000 aficionados por las calles de la ciudad, una cifra espectacular que aún no ha alcanzado su tope.

El Festival Internacional d Aerorap es otra iniciativa que ha logrado hacerse un hueco cada vez más importante en la localidad y también la que ha conseguido que la difusión alcance cotas importantes. El arte urbano es otra de las señas de identidad de la localidad donde en cada espacio se puede apreciar y disfrutar de los murales con temáticas diferentes pero siempre con la calidad y originalidad como bandera.

Todo ello para situar a La Bañeza en un lugar turístico y económico de preferencia, una localidad que abre de para en par las puertas al visitante ofreciéndole y variada riqueza. Da lo mismo la época del año. La Bañeza tiene actividad y vida los 365 días y eso lo demuestra con cada iniciativa o propuesta que elabore y desarrolle.

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