Editorial | Urgen estrategias para que el sector turístico tenga opciones de sobrevivir

León recibe más de un millón de turistas entre abril y octubre, el periodo más fructífero del año y en el que se mueven más de 200 millones de euros que suponen prácticamente el 70 por ciento de los ingresos del sector hotelero y hostelero. Perdida ya la perspectiva de mantener una temporada normal, la cuestión ahora es cómo se va a abordar la situación para que el escenario que se avecina no pase de malo a catastrófico. Sin ánimo de poner en cuestión la seguridad sanitaria, se impone arbitrar medidas para estimular a un sector del que León ha hecho su seña de identidad en los últimos años. No se puede obviar que el panorama es incierto y que el desarrollo de la pandemia deja aún muchos escenarios abiertos pero hay que trabajar desde ya para arbitrar propuestas que sean válidas para cada una de las etapas que quedan por transitar. No se puede caer en la improvisación y para ello es necesario transmitir directrices nítidas y definidas a un empresariado que ahora mismo no tiene muy claro a qué atenerse.

A la vista de la decisión del Gobierno de España de mantener en cuarentena a quienes entren en el país, parece que queda descartado que el turismo extranjero que animaba los agostos vaya a salvar la situación. Si así fuera, ya se sabe de antemano cuál es el perfil que hay que atraer. Eso si no hay ocurrencias mejores desde el Ejecutivo, que debería explorar otras posibilidades y no excluir a los de fuera antes ni siquiera de que lo decidan ellos mismos.

Hay que plantearse, además, que esto no va a ser flor de un día. Hasta que se generalice una vacuna, el sector turístico será donde más duramente se libre la batalla de la reactivación económica en los próximos años y dejarlo caer no es una opción.

Y, aunque no será la panacea, sí es una opción poner el foco de atención en los propios leoneses. Si hay una hora para arrimar el hombro es esta, así que no estaría de más que la población se concienciara de la coyuntura y se animara a conocer más a fondo la provincia. No será el primer territorio que lo plantee y no todo se puede dejar en manos de un Gobierno que, a día de hoy todavía no ha demostrado nada.