Editorial | Siete proyectos esenciales sobre los que asentar el desarrollo de Laciana
La Fundación Reserva de la Biosfera de Laciana presentará al Instituto de la Transición Justa un mínimo de siete proyectos de carácter ambiental que competirán con los de otras siete provincias para captar fondos europeos que posibiliten su ejecución. Se trata en todos los casos de propuestas relacionadas con el medio ambiente y perfectamente compatibles con su conservación, si bien los detalles concretos se mantienen en la más absoluta reserva. Asturias, Palencia, Teruel, Cádiz, Almería, Córdoba y La Coruña, que también tienen abierto el proceso participativo, concurrirán con sus argumentos en busca de esa financiación para afrontar una transición que, para que sea realmente justa, debería considerar no sólo el contenido de esos proyectos sino la situación del escenario en el que deben desarrollarse, es decir, las cuencas mineras, tras el cierre de las explotaciones de minerales y de las centrales térmicas, que en el caso de la provincia dejan un panorama desolador.
El Ministerio para la Transición Justa y el Reto Demográfico, y concretamente el instituto creado específicamente para evaluar y gestionar esos proyectos —y financiarlos en la misma medida que la aportación europea—, no puede ser ajeno a esa realidad y muy concretamente a la del valle de Laciana, cuya historia y desarrollo laboral y económico han estado esencialmente vinculados al carbón. El turismo sobre todo, la ganadería en menor medida y en general los recursos relacionados con un medio ambiente privilegiado tienen que ser los pilares sobre los que se sustente su futuro, pero que inicialmente sólo pueden asentarse sobre los Fondos para la Transición Justa, por la vía del Gobierno, y en el Plan de Dinamización de las Cuencas, por lo que corresponde a la Junta, del que depende otro proyecto clave para el valle: la ampliación de la zona esquiable de Leitariegos.