Edificio Tomás de Allende

En diciembre de 1903, Manuel de Cárdenas firmó este edificio para Tomás de Allende y Alonso en la calle Catedral (actual Ancha) c/v a la calle Bayón (hoy Sierra Pambley). Proyectó un sótano parcial para servicios; estructura de muros de carga y pilares de fundición en una planta baja con locales comerciales; dos portales (el de la calle Ancha conserva una exquisita decoración modernista plena de motivos vegetales) y dos cajas de escaleras, hoy con ascensor, que suben a diez viviendas situadas en tres niveles a fachada, y un bajo cubierta con los trasteros y dos viviendas más. Distribuyó los pisos al modo tradicional, con estancias homogéneas conectadas por un largo pasillo entre dos patios de luces. Dispuso los alzados a la calle en sutil ordenación tripartita. Planta baja de cantería con discretas portadas junto a los huecos de las tiendas entre sillería de talla rugosa y zócalo resaltado de caliza griotte. Cuerpo noble sobre balconada corrida en planta primera, con sus ménsulas, dinteles con motivos vegetales, y modernistas barandillas de forja —a golpe de látigo— entre bellos machones, bajo tres niveles de ladrillo aplantillado aparejado a tizón, pautados por horizontales impostas y columnas de balcones recercados, sobre consolas con la misma barandilla. Como remate, un bello alero de madera. Y en el chaflán, un frente revocado que abre grandes vanos a un refinado mirador forjado con bandas de azulejos policromados y aliento Art Nouveau, coronado por cúpula empizarrada de base cuadrada, óculos entre contrafuertes, bola y aguja… Cárdenas, siempre atento a las predominantes corrientes europeas acreditadas en Madrid, encauzaba su carrera leonesa instalado en el Eclecticismo. Fiel a patrones tradicionales en el diseño de las plantas, trataba de recuperar en los alzados el valor de una arquitectura de ladrillo, continuadora de cierto racionalismo constructivo decimonónico, aquí preñado de elementos ornamentales neobarrocos y modernistas de innegable carácter epidémico…