Editorial | Gestión ineficiente o un inexplicable remanente

Que el Ayuntamiento de León haya dejado sin invertir el año pasado 35,7 millones de euros, la mayor parte de ellos en proyectos que ya deberían estar ejecutados o en ejecución, sólo puede entenderse si se asume que la gestión municipal crece en ineficiencia. El volumen del remanente de Tesorería de los presupuestos de 2022 es inexplicable. Y compromete algunos de los proyectos que con más urgencia reclama la ciudad, ya previstos y anunciados; además de otros servicios de los que tampoco hay justificación para privar a los ciudadanos.

En total son más de 25 millones de euros los que el Ayuntamiento ha recibido de otras administraciones para destinar a proyectos concretos, que se mantienen en la improductividad total de las arcas municipales. Peor aún los que, como es el caso de los Edusi, tendrán que ejecutarse este año a toda velocidad si el equipo de gobierno que lidera José Antonio Diez no quiere que se devuelvan a la Unión Europea. Lo que tanto achacó el hoy alcalde al anterior regidor se ha convertido en uno de los grandes lastres de su mandato.