Editorial | Las urnas pasarán factura el próximo 28 de mayo

Las estimaciones de voto para las próximas elecciones municipales al Ayuntamiento de León ponen complicado que el PSOE reedite la Alcaldía de José Antonio Diez, a tenor de los datos recogidos por la encuesta de Celeste-Tel para Diario de León, que reflejan una clara victoria del PP de Margarita Torres, rozando el 36 por ciento de los votos frente a la caída de 1,6 puntos de la candidatura socialista, que no lograría llegar al 31 por ciento de las papeletas. Diez cosecharía así en las urnas el castigo a una gestión que ha tenido varios frentes abiertos que han hecho mella en la intención de voto de los leoneses. El descontento es palpable en cuanto al abandono de la ciudad, especialmente de los barrios, desatendidos pese al rosario de promesas de ‘descentralizar’ las actuaciones del consistorio hacia las calles periféricas. El ciudadano vive y convive en su entorno más inmediato con la suciedad y el deterioro, que son difíciles de esconder detrás de acciones oportunistas y puntuales. Además, la polémica del viaje a Catar del regidor y su esposa, invitados por Aspire durante el pasado mundial de fútbol, sigue bajo sospecha. Diez ha sido incapaz de aclarar o reconocer cuál fue el motivo de la invitación de la empresa catarí en aras de una transparencia que es lo mínimo que se le puede exigir al cargo que ostenta, además del respeto que parece haber perdido hacia sus votantes y hacia el resto de los leoneses. Y aquí entramos en la tercera pata de esta poltrona en la que se ha asentado Diez, que ha hecho de la arrogancia un estigma de su gestión, con desaires que también le pasarán factura en las urnas después de ser reprobado en bloque por la oposición a la que espetó un muy poco democrático «no me van a parar». A pesar de la volubilidad a la que nos tiene acostumbrados la política, quizás expresiones de desprecio a la corporación como la aludida también le sean recordadas si requiriera, por ejemplo, del auxilio de los votos de UPL y de Vox para renovar mandato, como augura la encuesta que hoy publica este periódico. Combinación harto complicada, en cualquier caso, y que dejaría la puerta abierta al PP para asumir la gestión de la capital.