Un sol abrazador

No pinta nada bien lo que nos dice el chamán del tiempo: las  mil aguas de abril  pueden quedarse en dos docenas y no alcanzarán ni a lavar el polvo del desierto que nos visita viendo campo libre y cielo abierto. Sólo hay una palabra para la España agraria y sedienta: ¡agua!, ¡que llueva!, y lo dice con la lengua seca de tanto abrir la boca mirando a ese cielo nidio sin nube a la vista y bajo un sol abrasador, ese sol que convierte un andaluz que cecea en  abrazador  sin que le falte razón... sol que abraza... y es el abrazo de oso. En Cataluña bordan el drama de la sequía que se les tumbó encima. Murcianos y alicantinos abandonan cultivos porque no hay agua que valga ni trasvase que lo remedie. Agua no va.

Llorarás por el agua que se fue río abajo sin hospedarla en el estanque que debiste o en el aljibe que no hiciste o en la presa que un ecologismo lindo maldice. Llorarás por el agua que despilfarras dejando abierto el grifo mientras te lavas los dientes. Llorarás por el agua que se hace negra fregando el monte de ceniza que antes fue bosque. Llorarás... O no. No te veo muy consciente de que en esta partida ya pintan copas vacías y bastos de palo seco. En la montaña que aquí ves desde todo lugar si miras al norte sólo quedan tres pañuelos de nieve en la cara solanera y cinco en los abeseos. Las fuentes mearán melancolías. Por las pedreras donde antes reía el arroyo crecerá el cardo, husmeará el lagarto y te guiñará el alacrán. ¿Por qué crees que desde hace siglos vinieron bautizando Rioseco o Riosequino a tantos pueblos?... ¿cuántos ríos secos siguen surgiendo en esta España en cuya nuca sopla ya el simún?... Y por si fuera poco, cada vez enguarras más ese agua; venenos le van en nuestros desagües. Y « el agua sucia no se puede lavar », dice un proverbio africano. Tampoco te consuele lo que decía Toni Morrison: « El agua tiene una memoria perfecta y está tratando siempre de volver a donde estaba », porque al agua también le roe un alzheimer y los cambios del clima le hacen olvidarse... y no sabe a dónde va... o va a donde hace gran daño. Algo loca sí que anda.