Acción y reacción

Presenciamos uno de esos partidos en los que el juego se precipita o se sostiene como consecuencia de una acción del rival en orden de acción y reacción posterior. Los leoneses un día más carecieron de respuestas estructurales y tácticas en los momentos malos, en los que los madrileños impusieron su dominio tanto en el plan como en el ritmo de juego.

Los leoneses, con un 1-4-1-4-1, repitieron la estructura sistémica del pasado domingo. Solís y Álvaro Juan por delante de Rovirola, permutaban por dentro las ayudas a Obolskii en la presión sobre salida rival, y realmente esto en los primeros momentos llegó a funcionar. Muchas acciones de robo y transición en esos primeros 25 minutos en los que Aarón y Ketu con las superioridades de los laterales sumaban multitud de llegadas por fuera, a ello se le sumó el gol a balón parado de Aarón, en la que Solís sacó en corto un lanzamiento de esquina y el jugador leonés aprovecho un aclarado al borde del área para golpear cruzado y anotar.

El Dux sufrió al principio porque Mancebo y Carlos Gil no llegaban a tiempo a las ayudas sobre sus laterales, pero una vez ajustado este problema le dio la vuelta a la tendencia y consiguió superar una y otra vez por fuera a los laterales leoneses. Fruto de ello, la acción del empate en la que tras un pase atrás Rubén Ramos encontró en el lado débil la ruptura de Mancebo para anotar.

En la segunda parte la superioridad de los de Villaviciosa fue evidente y palpable, sin miedo a filtrar balones por dentro para penalizar después descaradamente por fuera con la llegada de sus laterales. En una de estas y tras una jugada asociativa mediante la utilización del tercer hombre con doble pared, Álvaro Herrero ganaba línea de fondo y golpeaba para el gol en propia. Buenacasa que de nuevo salió y aportó buenos minutos, anotaba el empate momentáneo en un balón directo desde atrás, pero los madrileños encontraban al recién entrado Álvaro Martín en una recepción interior, que vino continuada de un golpeo lejano y preciso que ponía el 3-2 definitivo.

Como ya decíamos días atrás, la Cultural tiene muchas dificultades para adaptarse a las diferentes contingencias tácticas que le plantean los partidos.