Editorial | La tasa al turista enfrenta a Junta y Ayuntamiento

La iniciativa lanzada desde el Ayuntamiento de Segovia, gobernado por el PSOE, para implantar una tasa a las personas que pernoctan en Castilla y León ha recibido el respaldo del alcalde de la capital, José Antonio Diez, también socialista, para presionar a la Junta con el objetivo de que la apruebe. Otro municipio, Ávila, también se ha mostrado partidario de la propuesta a través de su gobierno independiente.

Pero las cosas no serán fáciles puesto que la Junta ya ha mostrado su rechazo frontal a la iniciativa. Tampoco ha sido bien vista por los profesionales del sector o por entidades como la Federación Leonesa de Empresarios (Fele).

Pero el asunto requiere una reflexión y un análisis detallado. Quizá no sean tantos los efectos que tendría sobre los visitantes, puesto que las experiencias que están en marcha en lugares como Cataluña o Baleares consiguen una financiación añadida para pagar precisamente unos servicios que se prestan a esos visitantes.

En muchos lugares la llegada masiva de personas genera unos costes añadidos en elementos fundamentales como la recogida de basura. O provocan un mayor coste en servicios como los policiales o en facilitar un consumo mayor de agua. En todo caso sería importante que se apostase por el diálogo entre instituciones y sectores implicados en el turismo para que las cosas se hagan de la mejor manera posible. Lo que no puede consolidarse es como un nuevo foco de pugna política, como una fórmula para establecer alianzas de beneficios espúreos o de presiones primando lo que no sea el verdadero interés ciudadano.