Oh, Canadá, ardes

U n himno nacional que no suene a marcha militar, sino a salmo de gratitud cantado a coro y en corro, invita a conocer al país que lo canta, si es que no a exiliarse ahí. Ese es el caso si trae el aire los sones del  Oh, Canadá , himno de un país más extenso que Australia, China o EEUU. Y allá se va mi alma, al paisaje de inmensidad rocosa y nevada que sigue al Gran Norte de Jack London, de la mano de Margaret Atwood y Leonard Cohen, dos anchos ventanales para asomarse al interior e intríngulis de un país cuya mejor noticia es no ser noticia casi nunca; y si lo en estos días, no se debe a tensiones de nación bilingüe -guerrita sin sangre que nunca llegó al río Yukon- y país que invita a una próspera inmigración multirracial, sino por haber registrado el martes la temperatura más alta de su historia, 49.5 grados, calor más infernal que el de Emiratos o el desierto de Atacama, así que la  cúpula de calor  instalada sobre el oeste canadiense y norte de los EEUU ha matado ya a más de 130 gentes nada preparadas para esa asfixia, calor inimaginable en unas tierras tan vecinas del Ártico.

El catastrofista profeta climático no pudo imaginar allí (o aquí) mejor argumento, aunque los expertos digan que « aún es necesario realizar estudios para encontrar su relación o no con el cambio climático; pero está claro que la probabilidad de producirse episodios extremos de calor de esta talla en todo el mundo aumenta y es mayor que en décadas anteriores ». Y nos arde ahora un presentimiento: sube la calora hasta el Septentrión y en los últimos años ya arden inmensos bosques finlandeses o siberianos sin sus nieves cortafuegos... ¿le llegará esta vez el turno al Canadá de tupido bosque gigante?... Dolerá mucho perder vidas, pero más aún que arda un pulmón verde; es irreparable.

Aun charruscao, viviría allí, nos dice Otavito para que le hagamos la pregunta ¡¿y eso?!, contestando él con otra, ¿conocéis a un solo futbolista canadiense?, ¡pues por eso! (qué pesadito con que el fútbol le da muchísimo pol culo y más estos días en que no deja de nevar aquí eurocopos de Eurocopa).