Diario de León
León

Creado:

Actualizado:

Se conoce que el PP no está al cabo de la calle igual que Tom Sawyer cuando estrenaba zapatillas en las avenidas pantanosas del viejo Missisipi. El PP parece ajeno al punto en el que las aceras han triturado el mito zapaterista. No sabe cómo ruge la masa con sólo oír la mención al presidente, antes santo de devoción, fenómeno social, ensayo de politólogos, fundador del efecto que lleva su nombre, reducido al punto de levantar entre la gente la misma pasión que la duquesa recién casada ante un andamio poblado de albañiles. Si lo supiera, al PP ni le habría inmutado el anuncio de ZP en León, que a la derecha le pudo causar el mismo efecto que el pájaro garrapatero al lomo del hipopótamo.

León ha pulido en un pispás la devoción que dijo mostrar por el hombre que ganó el Tour sin ser capaz de llevarse una meta volante en la vuelta ciclista de su pueblo. Al que recibió con palmas en el 2004, le espera ahora apostado en la carretera Carbajal, esquina Unicef, en formación de agraviados, en riguroso orden de llegada para las víctimas. Hecho añicos el imperio, a Zapatero se le saca más jugo subido sobre el caballo, no escondido, no tapado, aunque sea momificado, cual cid campeador en el campo de batalla del morito sarraceno.

No sabía el baranda de la derecha que cuanto más pasee ZP más votos se le auguran al PP, más indecisos se irán a la urna con la papeleta de Prada entre los dedos. ZP, adicto a la ingeniería social y entretenido en voltear costumbres y poderes fácticos que a la gente ni fu ni fa, ha acabado como los virreyes de colonia, al que ahora sólo rinden pleitesía los periodistas que echó de comer, los elementos que cubrió de lisonjas, los consiglieri que sentó en la bodeguilla, los colegas que invitó a merendar, los ceros que elevó a la enésima potencia. El PP no sabe qué hay a pie de calle si mitifica a un tipo al que se le pinta por los bares de León, entre tapa y clarete, como al mortificado que vuelve a penar en casa el capital que quemó emigrado, como al indiano que volvió arruinado de la aventura de ultramar. El PP no se ha enterado de lo que la calle estima y viene a resumir como el tiempo en el que nunca tanto ha estado en manos de tan poco; como el tiempo en el que nunca tan pocos hicieron tanto daño a tantos. Y el PP preocupado por ver la comitiva presidencial en León.

tracking