La crisis aviva las ferias y los mercadillos

El lustro de crisis económica que lleva sufriendo España con una inusual virulencia ha generado una caída en general en todo tipo de sectores comerciales. Pero curiosamente tiene un efecto contrario en el caso de los mercadillos y de las ferias tradicionales que han visto como el número de puestos instalados no sólo no disminuye sino que incluso en ocasiones se está incrementando.

Estos días se ha podido comprobar en las ferias de Boñar o Villablino, recientemente en la de San Froilán de La Virgen del Camino y todavía hasta hoy la de los Productos de León, donde el número de puestos incluso aumenta porque los consumidores optan por buscar alternativas más económicas frente al comercio tradicional y especialmente porque los propios vendedores se ven obligados a aprovechar más posibilidades de negocio en diferentes localidades que cuando soplaban vientos más favorables.

Durante todo el verano las ferias de la provincia han vivido con singular vitalidad tanto en el número de comerciantes como en el de vendedores devolvieron al menos por un día un poco de vitalidad a las calles de unos núcleos rurales que durante el resto del año padecen una continuada tendencia hacia la despoblación.