Diario de León

TRIBUNA

Reflexiones sobre un pleno

Publicado por
Laura Fernández Bermejo. Concejala de IU San Andrés del Rabanedo
León

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Y a he asistido a mi primer pleno como concejala. De toda esa amalgama de sentimientos, y vivencias me quedo con un par de ideas.

La primera: el grito interno que me salía del alma de «tierra trágame» cuando se trataron los puntos de retribuciones de los cargos electos, es decir, los nuestros. Yo como una trabajadora normal y corriente estoy acostumbrada a que mis condiciones laborales sean defendidas entre los representantes sindicales y la empresa. A tener que luchar para defender mis derechos laborales. Derechos que se lograron con tantas luchas y que nos están robando día a día. Cada día sufrimos las consecuencias de la precariedad laboral que nos aboca a unas condiciones de vida más difíciles.

Y en el Pleno yo, como clase política, me pongo alegremente mi sueldo. ¡Increíble! La alcaldesa de San Andrés, en un municipio con 80 millones de deuda, va a ganar casi el doble que el alcalde de Zamora y más que la alcaldesa de Barcelona y encima se va a subir el sueldo anualmente según el IPC. Sino fuera porque estamos hablando del sueldo de una alcaldesa y concejales sería una medida ilegal, puesto que el Estado no permite que ninguna administración suba los salarios a ningún trabajador. Además, toma como referencia de subida anual el IPC. Ese Índice de Precios al Consumo que hace tiempo dejó de ser un referente para la clase trabajadora y los pensionistas.

Si esto no es para que la tierra nos trague sí, por lo menos, para no sentirnos orgullosos, ni orgullosas de ello. ¿Cómo se puede conseguir que esto no vuelva a suceder? Porque está muy bien quejarnos, denunciarlo, votar en contra en el Pleno. Pero ¿qué propuesta en positivo tenemos Izquierda Unida? La llevábamos en nuestro programa, se llama Presupuestos Participativos. Algo tan sencillo, tan difícil, como que sean los vecinos y vecinas de San Andrés quienes establezcan el sueldo de sus representantes municipales. Pero hay que hacerlo de forma seria, analizando los presupuestos, estudiando los 80 millones de deudas, sabiendo qué servicios se deben ofrecer y qué costes tienen. Porque el salario de las concejalías y asistencias salen del Presupuesto del Ayuntamiento. ¿Cómo lo gestionamos? ¿Cómo lo repartimos?

Por supuesto que toda persona tiene derecho a un sueldo digno, y entre todas las personas se incluyen la alcaldesa, el grupo de gobierno y cómo no la oposición, pero también toda la clase trabajadora. Los salarios de quienes nos representan en los municipios tendrán que estar de acuerdo con la capacidad presupuestaria del ayuntamiento, no con la decisión personal de nadie.

En este tema de relaciones laborales, que conllevan dineros, me llamó también poderosamente la atención que para las dos personas que van a contratar de apoyo al equipo de Gobierno les asimilan a la categoría de administrativos, mientras que para el resto de los grupos de la oposición la categoría será la de auxiliares. ¿En qué criterios objetivos se basan para no valorar de igual forma el trabajo desarrollado por unos trabajadores o por otros? ¿Es menor responsabilidad la ejercida por la oposición? Simplemente, para mi modesto entender, es un tema de prepotencia, de falta de análisis y rigurosidad. En el Pleno no nos explicaron porqué consideraban que se merecían una categoría laboral inferior el personal eventual de la oposición.

El segundo momento que me gustaría comentar es el relacionado con el debate y reparto en las mancomunidades donde está presente el municipio: Serfunle, Saleal, Gersul. El PP reflejó muy bien en una nota de prensa lo que para ellos significan estos cargos: dinero. Acusaba a toda la oposición de haber hecho “un pacto de dinero” al haber aceptado participar en estos órganos. Es decir, que por haber aceptado estar en estas entidades y percibir retribuciones por asistencias el PSOE nos ha comprado. Eso refleja la idea que tiene el PP del servicio que prestan estos órganos, son fuente de ingresos personales.

Para IU nada más lejos de la realidad. Muy rastreros tendríamos que ser para que nos compraran por 220 euros por reunión, cuando hay un par de ellas anuales. Nuestra organización solicitó formar parte de Serfunle, porque si hay algo claro en este mundo es que todas las personas nos vamos a morir. Y lo que no puede ser es que enterrar a un ser querido arruine a una familia. Mi madre siempre nos cuenta cómo siendo ella niña el día que iban a su casa a cobrar “lo de los muertos” ese día no comían, pues el dinero que había era para pagar el seguro. Hoy, ochenta años más tarde, muchas familias siguen pagando seguros para poder hacer frente a los gastos funerales pues el coste es tan alto que es inasumible.

IU de San Andrés entendemos que este servicio puede y debe ser mucho más barato, al alcance de cualquier familia. Pues la muerte no hace distinción y si todos los seres humanos tenemos derecho a vivir y morir dignamente, también a ser enterrados con dignidad. Bastante sufrimiento tiene una familia en esos momentos como para que se agraven con la deuda que el entierro supone.

Por ello, queremos saber en qué se gasta el dinero Serfunle, entre otras cosas en pagar 220 euros a quienes forman parte de sus órganos, a propaganda, a … Estamos seguros que el servicio se puede abaratar y vamos a luchar por ello. Esta es la razón por la que hemos apostado formar parte de Serfunle. Para conocer sus cuentas, sus contrataciones, explicarlas, y hacer propuestas en positivo para que este servicio tan básico y necesario pueda hacerle frente toda la población de San Andrés, sin aumentar el dolor a los familiares.

IU de San Andrés queremos hacer una legislatura transparente, esperamos no caer en juegos sucios. Por ello, lo que se votó en el Pleno, nuestra postura en él, fue debatida ampliamente en dos asambleas. La voz que llevamos fue la de la unidad de nuestra formación, la que consideramos refleja el sentir de las personas que depositaron su confianza en IU. Animamos a quienes creen en nuestro proyecto a que participen activamente.

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