EDITORIAL | Un IPC que precisa un análisis detenido

El Fondo Monetario Internacional (FMI) mejoró ayer sus previsiones para la economía española. Alabó la salida de la crisis aunque reclamó de nuevo más reformas para afianzar ese camino que en la economía real es probablemente más lento y tortuoso de lo que aseguran los datos macroeconómicos. La recuperación avanza y lo hace de una manera muy desigual entre los distintos territorios. Y por ello resulta llamativo que León se sitúe a la cabeza del Índice de Precios al Consumo (IPC) en España al registrar el mayor incremento en los últimos meses. En una provincia que, junto a la recesión generalizada, ha padecido problemas notables en sectores tradicionales como el carbón, los precios se disparan y habría que analizar las razones. Hoteles, sanidad y coches son, con vestido y calzado, los productos que más se encarecen. Y llama la atención el dato de los hoteles, que elevan sus precios un 8% según los datos recogidos por el INE. León tiene problemas coyunturales y estructurales graves y no parece el mejor momento para buscar el beneficio rápido hipotecando el futuro.