EDITORIAL | Faltan las balsas del Órbigo y Villagatón
El toque de atención que ayer Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) dio sobre la importancia para la ribera del Órbigo de los planes para ejecutar las presas proyectadas en el Plan Hidrológico de la cuenca es un motivo para reflexionar sobre las prioridades de una comarca que tiene en el lúpulo su cultivo estrella. Alega el organismo regulador que, en épocas como la actual, de escasez de agua, los 30 hectómetros cúbicos que aportarían La Rial y Los Morales serían «un importante desahogo» para la campaña, especialmente en una comunidad de regantes que, según CHD, es la que más agua consume por hectárea. Se trata de un proyecto que se enfrenta al rechazo social plasmado en las cientos de alegaciones que hoy estudia el Ministerio de Medio Ambiente. En estas circunstancias es necesario buscar consenso para que nadie salga perdiendo en un asunto que dará más problemas en el futuro. Y hablando de toques de atención, es obligado recordar a las administraciones implicadas, incluida CHD, la urgente puesta en marcha de Villagatón.
