Diario de León
Publicado por
César Alvarado Alcalde
León

Creado:

Actualizado:

Los nativos y visitantes asiduos de la montaña oriental leonesa, sabemos de sobra que, con esta denominación tratan de ocultarnos actuaciones sobre el medio nada inocentes y sí nefastas para su equilibrio y conservación. Son de sobra conocidos los fracasados intentos de situar en este lugar de paso una estación para la práctica del deporte del esquí o divertimento, debido a la inconsistencia y posterior fijación de las precipitaciones nivales, muy influenciadas por las corrientes relativamente cálidas que ascienden desde el cercano mar Cantábrico. De llevarse a cabo este proyecto deberá realizarse bien al oeste del puerto este que, afectaría al conjunto de los montes Coriscao, Vallines y Escaño en los que se alcanzan cotas superiores a los dos mil metros o en su parte este, interesando parte del valle del Naranco, la totalidad del circo de Bobias y montes que lo cierran. Cubil de Can, Tres Provincias, Cuartas, etcétera, conjunto este en el que se superan los dos mil trescientos metros de altitud y dentro del macizo de Peña Prieta, máximo exponente orográfico de la Cordillera Cantábrica y en el que se encuentran las principales sugerencias hídricas que conforman el caudal del río Esla y afluentes. Esta circunstancia unida a la fragilidad del soporte vegetal y herbáceo que lo cubre, muy alterado ya por la excesiva presión ganadera, decantada últimamente hacia la cabaña bovina más dañina en estas altitudes que la anterior cabaña ovina trashumante, desaconseja, per se, la instalación de un nuevo elemento perturbador. Si a estos supuestos de índole medioambiental y ecológica les sumamos las disposiciones estatales y comunitarias que en su día declararon el entorno, zona natural de especial protección e incluidas en parques Natural de Fuentes Carrionas, Regional de Picos de Europa y limítrofe al parque nacional de la misma denominación, y todo el conjunto a punto de ser declarado por la Unesco, Reserva Mundial de la Biosfera, tenemos un soporte político muy estimable para seguir manteniendo el mismo status de Reserva del que goza en la actualidad. Cualquier ciudadano medianamente informado sobre estos temas, no ignora a estas alturas las vicisitudes de precariedad por las que atraviesan las estaciones ya instaladas en esta Cordillera, Leitariegos, San Isidro, Pajares y Alto Campoo, que se sostienen gracias a las cuantiosas transferencias dinerarias de los erarios públicos de Instituciones o Comunidades a las que, cada una pertenece y que a pesar de estos dispendios no logran detener la transfugación de practicantes de este deporte hacia estaciones, principalmente de los Pirineos, en sus dos vertientes, más favorecidas por la climatología invernal. Circunstancia que nos reafirma en su inviabilidad económica. Esta es una comarca de gran valor ecológico y paisajístico, pero, como la gran mayoría de las cordilleras, muy escasa en recursos económicos intrínsecos, incapaces de sostener y alimentar un colectivo humano numeroso, dentro de una economía moderna de mercado, muy diferente en todas sus manifestaciones a la economía de subsistencia que allí regía hasta hace muy pocas décadas. Entonces se disponía del valor añadido de la zona más rica y productiva, anegada hoy por las aguas que retiene la presa de Riaño. Aguas que generan o potencian muy lejos de allí, actividades muy lucrativas y rentables y que además forzó el éxodo de unos recursos humanos sin duda muy valiosos y aprovechables. La solución a los graves problemas económicos y humanos de esta Montaña Oriental no reside, creo yo, en «San Glorio Estación de Esquí ¡Ya!», propuesta muy simplista y electoralista. La solución debe provenir de una aportación de medios en consonancia con los valores ecológicos y paisajísticos de la zona y de una importante participación en los pingües beneficios que genera su enorme reserva hídrica y su potencial hidroeléctrico.

tracking