Diario de León

Polvo, ruidos y ... cintas de video Abogados del síndrome tóxico ¡Soy Bierzo, cuídame! Perros sin correa y sin bozal ¿Quién pagará el pato?

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Si algún lugar merecería encontrarse a salvo del «mundanal ruido», aparte de los templos, ese lugar se -rían las bibliotecas; que para eso son templos del saber y el saber se adquiere en silencio. No parecen entenderlo así los responsables de alguna de nuestras bibliotecas públicas, más interesados en engrosar las estadísticas, que en ofrecer un servicio realmente de calidad. Cualquiera que se acerque estos días por la Biblioteca Pública, de Santa Nonia, dependiente de la Junta, sabrá a lo qué nos referimos. Las obras de reforma a que está siendo sometido el edificio, bienvenidas sean, ocasionan tales molestias que algunos usuarios nos preguntamos si no se podrían hacer las cosas de otra manera: insonorizaciones, otros horarios de trabajo, etcétera. Arriesgarse a pasar unas horas de estudio o intentar hojear libros o periódicos es todo un acto de voluntarismo; hay días que el ruido es infernal, el polvo lo inunda todo, otros días no funciona la calefacción o no hay agua. Y somos muchos los que no disponemos de otro centro de lectura, de estudio, de investigación que la biblioteca pública, pero no así. Yolanda González Fernández, y dos firmas más (León). Me gustaría hacer público el agradecimiento de muchos afectados al abogado de León Luis Alberto Díaz pues gracias a él hemos podido darnos cuenta de muchos engaños, viendo que tenía mucha razón cuando nos decía en las reuniones que teníamos que pagar al abogado de Madrid Carlos Vila el uno por ciento de las indemnizaciones y no las cantidades que nos obligaban a pagar, enhorabuena por el juicio que le ha ganado a este abogado de Madrid y que hace justicia a los enfermos de León,. ¿Cuándo nos daremos cuenta los afectados de quién es uno y otro abogado? Mercedes Barrientos (León). Se empieza a comentar que el turismo de sol y playa está tocando techo, que tenemos que vendernos mejor y hacer nuevas ofertas de turismo de interior. Pues bien. Yo vivo y soy de una comarca privilegiada en este aspecto y muchos más. Tenemos historia, arte, magníficos monumentos, además de un paisaje envidiable: se han recuperado muchas casas rurales, es decir: tenemos todos los elementos necesarios para fomentar turismo de interior con el potencial económico que esto debería suponer para una comarca, que si no se toman medias urgentes, se muere. Y es lamentable. Este verano, en uno de mis recorridos por El Bierzo, visité con unos amigos la histórica Herrería de Compludo, espléndida, como espléndido el paisaje a orillas del río Meruelo. Decidimos, para completar el día, acercarnos a los pueblos de Palacios y Espinoso de Compludo. El primero dista de Compludo unos dos kilómetros, y el segundo, seis, más o menos. El viaje hasta Palacios es precioso, los montes. los valles y maravilloso el pueblo, en medio de una naturaleza impresionate, pero ¡qué camino de cabras...! Yo me pregunto: ¿es así como queremos promocionar El Bierzo?, no digo que se hagan autopistas en estos lugares, pero sí caminos transitables. Lo mismo nos sucedió para visitar Espinoso, precioso pueblo de piedra, con varias casas rurales que conservan su tipismo. Pero ...¡qué camino...! piedras, polvo en cantidad; son seis kilómetros que parecen veinte. Correctamente, desde Espinoso, visitar La Herrería, «seis kilómetros», es un paseo. Pero ¡claro...! nos encontramos con el pedregal. Y tendríamos que bajar a los Barrios, Ponferrada, Molina, subir por Riego de Ambrós, bajar la cuesta del Acebo, y ya por fin La Herrería, y su entorno. Todo este recorrido se evitaría, como indicaba anteriormente, con un camino transitable. ¿Es que los señores del Ayuntamiento de Ponferrada, Consejo Comarcal, Diputación, concejales de Cultura, no se acercan por estos parajes, aunque sólo sea por curiosidad...? si así fuera, tomarían otras medias para que estos lugares que hemos heredado pudiéramos disfrutarlos de una forma un poco más cómoda. ¡Ya quisieran otras comarcas tener este potencial...!. Pero aquí... ¿qué nos pasa? ¿es que el botillo, los pimientos, el vino y las cerezas, nos embotan la inteligencia...? ¿o creemos que con estos productos, magníficos por otra parte, es suficiente y abandonamos nuestro patrimonio histórico y cultural. A quien corresponda, no es cuestión de mucho dinero, que se multiplicaría con creces, es cuestión de sensibilidad y responsabilidad política. No hace muchos días en El País escribía Rosa Montero un reportaje ensalzando las cualidades de esta comarca. Y el eslogan dice: «Soy Bierzo. Cuídame» M.ª del Pilar Fernández Alvarez (Bembibre). Alicia Cabero Pérez, a través del Teléfono del Lector, nos comenta: «Quiero denunciar a los dueños de los perros, que cuando los saquen a pasear los lleven con correa o con bozal pues el sábado pasado me he llevado un susto de muerte. Estando paseando con unas amigas, nos hemos cruzado con dos matrimonios con cuatro perros, dos pequeñitos y dos grandes. Después de pasar junto a nosotras, el perro se ha vuelto y me ha dado un mordisco impresionante. No lo he denunciado pues el dueño fue muy amable diciéndome que estaba vacunado y que tenía un seguro, aparte no me hizo sangre pues llevaba una parka muy fuerte y no pasó nada, solamente rasguños y un hematoma». Vivimos en un país del revés en muchos sentidos. y el más bochornoso es el de la justicia que aquí se imparte. Un tipo puede golpear a una mujer y amenazarla de muerte y, tras ser denunciado repetidamente por ello, no hacerse nada para evitar el anunciado asesinato, que llega fatalmente. Y eso, contando además con una enorme cantidad de precedentes idénticos. No hace mucho, uno de éstos hombres, al ser dejado por su mujer, blandió ¡un hacha! desde la calle en dirección a la casa donde se había alojado ella, para «convencerla» de que volviera. Y este hecho, que fue probado y que cabalmente era un argumento incontestable para meterle en prisión y mantenerle allí durante mucho tiempo, no produjo tal efecto ni mucho menos. Quien haga el ejercicio mental de representarse a sí mismo avasallado a golpes a una mujer a fin de reducirla y vencer su resistencia a ser violada, reconocerá de inmediato que para sujetos capaces de hacer esto, y el violador del chándal lo fue, una mujer no tiene la dignidad de ser humano. Que es más bien una presa, y que se sirven de ella lo mismo que de un animal. Vamos, que es como si fueran a cazar perdices, por ejemplo. Una de las abogadas de la acusación, manifestó que este angelito, que tan bien se ha portado en la cárcel, pasó de ganar mucho dinero en ella a ganar el mínimo tan pronto como se le retuvieron las primeras 1.190 pesetas de los más de ocho millones que debe pagar a las víctimas en concepto de indemnización. Si estuviera arrepentido, si tuviera corazón que le permitiera ver el sufrimiento que había causado, ¿habría sido ésa su conducta? Alfredo Tomás González (León).

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