Una visita mal gestionada

LA ÚLTIMA VISITA del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a León ha dejado sensaciones contradictorias. El mítin celebrado por la tarde, con lleno clamoroso, era un acto de partido para consumo interno. Respondía a un compromiso personal de respaldo a la candidatura del socialista Francisco Fernández a la alcaldía de León. Otra cosa fue la actividad matinal en el Hotel San Marcos. LLegó el presidente con las alforjas cargadas y le metieron por la puerta de arrastre, que dicen los taurinos. En la frontal le esperaban los campesinos de Asaja para demandarle que las ayuda no se pierdan como el agua en los canales de riego. Me produce desasosiego que un presidente llegue a su casa y no entre por la puerta principal. Y no lo digo por descalificar la manifestación campesina. Al contrario. Pongo el acento en quienes eligieron las gateras. Pero, a lo que iba: la presentación por la mañana de las novedades para el Inteco, junto a directivos de IBM y de la Once, tuvo una gran transcendencia para León. En ese acto matinal conocimos también el compromiso de que el Inteco gestionará toda la apoyatura de comunicación e informática para la Ley de Dependencia. Es indudable que ahora sí empieza a verse un futuro importante para el Inteco. Hasta ahora lo percibíamos como poco más que palabras y ríos de tinta en los periódicos. Lo que ha pasado con la última visita de Rodríguez Zapatero es que, en parte, fue quemada por adelantado con comentarios e informaciones contradictorias y desmesuradas. El PSOE leonés y el entorno de La Moncloa deberían aprender que no se puede vender la piel del oso antes de cazarlo. Y que las noticias deben producirse a su debido tiempo. Y, además, vocearlas el protagonista, en este caso, el presidente del Gobierno. También ha sido noticia esta semana el acuerdo alcanzado por la UPL y el MASS para elaborar listas conjuntas de cara a los comicios locales y autonómicos de mayo próximo. Sin duda alguna, el acuerdo va a significar que en muchos ayuntamientos del Bierzo, donde los leonesistas sólo cuentan con un corregidor, el de Toreno, habrá una tercera lista con grandes posibilidades, lo que puede contribuir a hacer más abierto y variado el mapa político provincial. Pero, así mismo, ese acuerdo va a tener un fuerte impacto interno en el PP, en el que cada vez hay más gente descontenta o desconcertada con la deriva en la que rema el triunvirato dirigente, esto es: Isabel Carrasco, Eduardo Fernández y Cipriano Elías. Y para concluir: desde este balcón he apoyado sin fisuras y de forma reiterada a la Asociación Leonesa de Amigos del Ferrocarril. Admiro su meritoria labor. Desde hace años viene fajándose en defensa del patrimonio ferroviario, restaurando locomotoras y vagones; y, en definitiva, preservando la memoria de más de un siglo del ferrocarril en León. Rresulta completamente insostenible que a estas alturas ni Renfe, ni el Adif, ni la Sociedad León Alta Velocidad, hayan sido sensibles ni capaces para responder positivamente a la propuesta del Museo Ferroviario, conservando la marquesina de la actual estación y todas las demas propuestas de la asociación. Que el último sobre se lo hayan devuelto sin abrir deja claro la cantidad de incompetentes que hay en las tres sociedades mencionadas.