El número de víctimas en accidentes de tráfico desciende al nivel de 1960
El Gobierno rebajará el límite de velocidad en las carreteras convencionales, una medida que criticó con Zapatero
Un total de 1.304 personas han fallecido en vías interurbanas españolas durante el año 2012, lo que significa 180 víctimas mortales menos que en 2011 y un descenso 12 por ciento, según el balance provisional a 24 horas avanzado este martes por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.
Díaz, que ha calificado esta bajada como un "descenso notable", ha subrayado que el nivel de siniestralidad en 2012 se asemeja al de 1960 en España, con 1.300 fallecidos, teniendo en cuenta que en aquel año había registrados un millón de automóviles y dos millones de conductores, mientras que en 2012, había 31 millones de automóviles y 26 millones de conductores y se realizaron 364 millones de movimientos.
Siete de cada diez víctimas mortales de tráfico se registraron en el 2012 en vías secundarias. Por esta razón el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha anunciado que el nuevo código de la circulación reducirá en primavera la velocidad máxima de 100 kilómetros por hora permitida en estas carreteras secundarias. El ministro no ha concretado cuánto se reducirá esta velocidad máxima ni ha querido avanzar si, en cambio, se aumentará en autopistas y autovías. Pero en cualquier caso, la decisión de rebajarla está tomada. "La idea es que el diferencial entre la velocidad máxima en carretera y en autovía (120 km/h) no sea tan estrecho", se ha limitado a comentar.
Medida "soviética"
El anuncio del actual Ejecutivo contrasta con la postura del PP en febrero del 2011 cuando el entonces portavoz, Esteban González Pons calificó de "sovietica, caótica, esperpéntica y ridícula" la bajada del límite a 110 km/h aprobada por el Gobierno de Zapatero. "¿Es que Zapatero no tiene nada mejor que hacer? Mañana podría apagar la luz a las diez de la noche, limitar el consumo de carne, o obligarnos a vivir dos familias por casa", abundó. Y remachó categórico: "Así no se gobierna un país".
El titular de Interior ha recordado que en 2011 se llegó a la cota histórica de descenso de fallecidos por debajo de los 1.500 muertos. Concretamente, se registraron 1.484 fallecidos y que en aquel momento era justo atribuírselo a quienes con su gestión lo habían hecho posible, así como a los conductores y a la Guardia Civil, a quien ha vuelto a felicitar especialmente.
"Cada fallecido es un drama que hay que intentar evitar, pero es una cifra de reducción que valía la pena resaltar --ha agregado--. Tengo la satisfacción de decir que este año hemos conseguido bajar todavía más esa cifra".