TEMPERATURAS
Las muertes por calor y frío en León caen de 118 a 14
Los fallecimientos por causas atribuibles a las temperaturas descendieron un 55 % en Castilla y León
Las muertes por causas atribuibles a las temperaturas, ya sean por intenso calor o por el frío, descendieron un 55% en Castilla y León al pasar de las 813 registradas en 2023 por el MoMo, el Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria, a las 373 anotadas al término de 2024, informa Efe.
Según este censo, gestionado por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III, Salamanca —con 131 frente a 446 en 2023— se situó a la cabeza de la Comunidad. Por detrás se situaron las provincias de Valladolid (50 vs 71); Burgos (42 vs 35); Palencia (41 vs 36); Segovia (38 vs 28); Ávila (28 vs 32); Zamora (16 vs 17); León (14 vs 118); y Soria (12 vs 29). La herramienta MoMo fue desarrollada en 2004, en el marco del Plan de acciones preventivas contra los efectos de las temperaturas excesivas (Plan Calor), coordinado por el Ministerio de Sanidad, para reducir el impacto sobre la salud de la población como consecuencia del exceso de temperatura.
Objetivo
El objetivo de MoMo es identificar las desviaciones de mortalidad diaria observada con respecto a la esperada según las series históricas de mortalidad. En Castilla y León, el año pasado, se notificaron 29.264 decesos, con un exceso de fallecimientos de 779. Cerca de la mitad por las temperaturas.
Esas muertes que el MoMo vincula con el tiempo se concentran en cuatro meses: enero, con 55 fallecidos; julio, con un total de 83 decesos; agosto, el mes que más muertes anotó por defunciones atribuibles, en este caso, al exceso de temperaturas (141); y el pasado mes de diciembre, donde el MoMo estima que 58 personas pudieron perder la vida esta vez, a consecuencia del frío con termómetros muchos días bajo cero.Hay que echar la vista atrás, a 2020, en plena pandemia de la covid para encontrar periodos en los que la Comunidad anotó más muertes de las que se observan habitualmente.Marzo de 2020 registró un exceso de mortalidad de más de 1.850 personas, ninguna atribuible a temperaturas. Abril de ese mismo año registró otras 2.792, tan sólo tres atribuibles a temperaturas. El calor excesivo puede alterar las funciones vitales si el cuerpo humano no es capaz de compensar las variaciones de la temperatura corporal. Los decesos provocados por las bajas temperaturas se producen debido a que el estrés térmico provoca un colapso circulatorio.