Miles de personas han vuelto a subirse a los tejados de sus casas y a los montes de la ciudad
Las bandas armadas asaltan en Haití los camiones con alimentos
Los habitantes sufren pánico por las inmensas lluvias y por los asaltos armados
Una fuerte lluvia empezó a caer ayer por la tarde en Gonaives, lo que provocó el pánico de la población, que aún no se ha recuperado de las mortales y catastróficas inundaciones dejadas por la tormenta Jeanne . Miles de personas comenzaron a subirse de nuevo, seis días después de la visita destructiva de Jeanne -actualmente un huracán que avanza por el Atlántico hacia el sureste de EE.?UU.-, a los tejados de sus casas y a los montes que rodean la ciudad. En el noroeste de Haití, y principalmente en la ciudad de Gonaives, se calcula que la cifra de muertos puede llegar a ser superior a 2.000, muy por encima de los 1.113 fallecidos reconocidos oficialmente, además de 1.251 desaparecidos. Al empezar a llover nuevamente, Pierre-Robert Auguste, presidente de la Asociación de Empresarios de la región de Artibonite, a la que pertenece Gonaives, instó a la población a través de varias emisoras de radio locales a refugiarse en los montes que rodean la ciudad para protegerse. Auguste invitó también a las autoridades eclesiásticas a recibir a las personas más vulnerables, principalmente niños, mujeres embarazadas y ancianos, en las iglesias. Operación dificil Esta operación resulta especialmente difícil teniendo en cuenta la cantidad de gente que ya está a la intemperie, tras haber perdido totalmente su vivienda y todas sus pertenencias. Las autoridades haitianas de Protección Civil han estimado que la tormenta tropical, luego convertida en huracán y que amenaza actualmente a las Bahamas y Florida (EE.?UU.), ha dejado a unas 300.000 personas sin hogar. La mayoría de la población, además, tampoco tiene manera de oír esos mensajes, únicamente accesibles para quien tiene un vehículo dotado de aparatos de radio. La falta de electricidad es total, así como de comunicación telefónica. El pánico ante las nuevas lluvias se ha sumado a la desesperación por conseguir agua potable, alimentos y medicinas, los bienes que más escasean. La distribución de ayuda humanitaria en Haití se complica cada vez más, después de que las inundaciones evitaran el acceso de vehículos a las zonas más afectadas, con la irrupción de grupos armados que se apropian de los artículos de primera necesidad. Esos grupos armados están asaltando las caravanas de ayuda humanitaria que poco a poco consiguen llegar a Gonaives.