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El Santo Padre recibe hoy el Anillo del Pescador con un nuevo ritual El Papa en la calle

Conservador, mayor y sin ganas de impulsar cambios en la Iglesia. Así ve la mayor parte de los internautas de la edición digital del Diario a Benedicto XVI, cuya elección sí gusta al 56% de los

Publicado por
Iñigo Domínguez María Carnero - roma redacción
León

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El nuevo pontificado de la Iglesia católica se abrirá formalmente hoy en el momento en que Joseph Ratzinger, Benedicto XVI, introduzca uno de sus dedos en el Anillo del Pescador y le coloquen sobre los hombros el palio. Estos dos símbolos que sustituyen la antigua coronación, suprimida por Pablo VI, culminarán una ceremonia de dos horas en la plaza de San Pedro a la que asistirán medio millón de personas, 150 delegaciones extranjeras y representantes de otras religiones. Toda la ceremonia ha sido revisada para establecer un nuevo rito que rescata símbolos milenarios e introduce novedades litúrgicas. La razón es aplicar definitivamente las reformas del Concilio Vaticano II. Tras los primeros cambios de Pablo VI, Juan Pablo I y Juan Pablo II improvisaron en 1978 «algo que sustituyó el acto tradicional, pero sin profundizar demasiado», explicó ayer en una rueda de prensa Crispino Valenziano, de la oficina litúrgica. Esta vez, Benedicto XVI aprobó al día siguiente de su elección un nuevo ritual. Antes de la misa, que empieza a las diez, el nuevo Papa descenderá a la tumba de San Pedro, situada bajo el altar de la basílica, junto a los cardenales y los patriarcas ortodoxos que acuden a la ceremonia. El significado de esta visita, la primera novedad del acto, es hacer partir el pontificado del sucesor de San Pedro del punto al que llegó el apóstol, como signo de continuidad. La reciente elección del alemán Joseph Ratzinger como nuevo pastor de la Iglesia católica no ha dejado indiferente a nadie. Un nombramiento que genera debate en la calle, y, como no, en Internet. El 56% de los internautas que han participado en el debate de www.diariodeleon.com consideran que Benedicto XVI será un buen guía para la Iglesia católica. Mientras, el 42% restante mostró su disconformidad con la designación del cónclave cardenalicio. Opiniones vertidas en la edición digital del Diario de León desde terminales de ordenadores situados en distintas ciudades de España y de fuera de sus fronteras. Éstas son algunas de ellas: Walter Aguirre (Guayaquil) «La solvencia intelectual y moral de Ratzinger le permitirá estar a la altura de las circunstancias. La iglesia está en buenas manos». Álvaro Boeza (Madrid) «Un hombre tan inteligente tiene que reflexionar y hasta cambiar de opinión. Decidirá lo mejor para su iglesia y para sus fieles. Tiene derecho a la cita evangélica por sus obras les conoceréis y a mayor caridad y paciencia por parte de los que le juzgan tan precipitadamente. Tiempo al tiempo». J. Muñoz (León) «Creo que es una buena elección y si es de tránsito como ya se ha dicho, puede que sea la mejor. Superar a Juan Pablo II no es nada fácil». Pelagiuos (Gijón) «El Espíritu Santo, el azar, el destino, los votos... lo han elegido, sea cual sea el elegido nunca será a gusto de todos. Los católicos creo que han de aceptar las reglas marcadas por su iglesia y considerar que una persona en el papado, al ser el máximo responsable, puede cambiar; un conservador ablandarse y un progresista endurecerse». Fran (Belfast) «Creo que lo que debería hacer el Papa y toda su corte es salir de su torre de marfil y afrontar problemas reales. Dejarse de dogmatismos y luchas morales y trabajar en contra del hambre, la guerra y el sida. Me parece una inmoralidad que condene el uso del condón como preventivo del sida cuando en África mueren miles de personas a causa de ello. Mientras ningún Papa trabaje en este sentido, ningún Papa merece mi respeto». Gabriela (Uruguay) «Creo que la elección de este nuevo Papa no es acertada.....el mundo esta viviendo hoy por hoy nuevas ideologías y costumbres que han ido dejando de lado lo conservador».

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