La secura

UN FUEGO invisible que va en el aire sopla brasas sobre un mar de cereales que se las prometía. Será un cosechón, dijeron cuando se nos presentó mayo entre chaparradillas y florecimientos. Venía guapa la costera del trigo duro y del centeno. Pero un viento que ardía está agostando aquella esperanza y esa noticia verde que aún festonea todos estos campos de pan llevar. La ducha que esperaba el grano para engordar en su sazón no llega, la provindencia cierra el grifo y aquellos agoreros que vaticinaron que este sería el segundo año de sequía están empezando a lamentar su acierto. Mayo con treinta grados no es mayo cazurro; ni manchego. Amarillea la pampa castellana y la paramera. Aseguran que de persistir la tacañería de las nubes podrían perderse mil kilos de cereal por hectárea, que ya es mordisco... ya. Así que no va quedando otro remedio que ponerle a estos augurios la cebada al rabo y la rogativa en movimiento. Algunos pueblos de montaña ya han sacado la imaginería a procesionar por esas securas suyas, porque también la montaña, donde no hay mieses, tiene la sequía apercollando su único fruto, la hierba, el pasto, la siega del prado de la que saldrá el pasapaorte para que todos estos ganados puedan cruzar el invierno en sus cuarteles y cuadras sin ser detenidos en la aduana de la escasez o la ruina. «Usted saque a san Roque, a la Purísima o a quien quiera, señor párroco, pero pamí que no está de llover», dijo aquel alcalde en aquella chirigota popular. El agostamiento en mayo no es sólo cosa del campo. Otras sequías están pidiendo a voces unas cuantas rogativas para que los debates sobre la nación no se queden en abrojos repetidísimos, en escasez de ardores y en orfandad de brillo parlamentario. Hay sequía de ideas que no permite crecer trabajos y afán productivo en un metro cuadrado, sino pisos que hacen empobrecerse los salarios... Sequías de solidaridad interregional, de genio creador, de valores y una mínima moralidad... sequía de una mínima decencia informativa que impida convertir la muerte de una coplista en noticia nacional rezumada de espectáculo y negocio con emjambre de cámaras y periodistas, conexiones en directo para no decir nada... y para avergonzarnos, porque jamás dedicarían esta atención a un científico, un prohombre o... una sequía agraria.