Solidaridad en las fiestas Calle Luis García Montero

Otro tipo de cartas Uno de los días más emotivos de la Navidad es el 6 de enero. O mejor, la noche del 5, cuando los tres reyes magos de Oriente recorren a carreras las casas de los niños de todo el mundo. La emoción, sin embargo, comienza muchos días, incluso muchos meses atrás. Empieza con la búsqueda del regalo y continúa con la redacción de la carta. No es necesario que en ella incluyan estrictamente regalos materiales, también puede tener cabida un deseo solidario o esperanzador. Los niños de León, además, tienen la posibilidad de ser los escogidos en leer una misiva para dar la bienvenida a Melchor, Gaspar y Baltasar. Ayer se celebró la final de este concurso, organizado por el Ayuntamiento de León, en la plaza de San Marcelo. Los pequeños, subidos en el escenario de la plaza, leyeron sus cartas ante la atenta mirada de sus contrincantes, los demás niños y los familiares de todos. A pesar del frío, de visita El alcalde de León, Mario Amilivia, se acercó ayer hasta los puestos del mercadillo navideño que todos los años se monta en las céntricas calles leonesas de Pilotos Regueral y Ruiz de Salazar. Allí, en las decenas de puestos, se pueden adquirir cientos de productos artesanos. A pesar del frío, un recorrido por estas dos calles, situadas entre el instituto Juan del Encina y el parque del Cid se pueden adquirir un sinfín de regalos para Nochebuena y para el día de Reyes. Operación kilo Los niños y jóvenes del colegio Benito León y del Instituto Valles del Luna han participado en la Operación Kilo que por estas fechas organiza cada año la Asociación de Mujeres Solidarias, Damas Salesianas. El objetivo es que cada estudiante aporte un kilo de comida para entregárselo a los más necesitados. En total se recaudaron unos 300 kilos entre los que había legumbres, arroz, pasta, conservas, etcétera. Todos los alimentos se entregaran en la sede de la asociación en León, que unidos a lo recaudado en otras localidades se repartirá entre inmigrantes y familias necesitadas. El Price, en Madrid El Teatro Circo Price abrirá sus puertas por primera vez el próximo 27 de diciembre con Navidades en el Price , espectáculo que recupera la tradición del que era conocido como el mayor espectáculo del mundo y con el que se recoge el testigo del legendario Price, circo estable de Madrid hasta 1970. Esta programación navideña es un anticipo de la apertura oficial a finales de febrero de las instalaciones estables del Nuevo Teatro Circo Price, situadas en la Ronda de Atocha. TODO LO QUE releemos con placer en el fondo nos rejuvenece¿ Yo acabo de terminar el libro titulado Poesía 1980-2005 en el que Luis García Montero agrupa sus poemarios publicados hasta ahora y me ha dado por pensar que las obras completas de un autor suponen una invitación para que el lector confeccione su propia antología. Más allá de los manuales, sí, sobre nuestros autores amados todos tenemos un canon personal. Por eso me ha sorprendido escuchar al poeta granadino en el programa de Radio 3 La Estación Azul definiendo la poesía como «un género de ficción». Y, con el máximo respeto, me permito discrepar pues en mi canon personal los poemas de este autor que atesoro con más cariño son precisamente aquellos en los que veo menos ficción y más verdad. Por ejemplo de su primer libro titulado Tristia aún escojo el poema Canción de invierno y pienso en ti, en aquella primera noche corta y nuestra y en todo lo que hay de inaugural en el resto de mis moches... Estés donde estés bien sabe ese poema que te recuerdo; que te recuerdo. Pero de El Jardín Extranjero aún me quedo con uno de esos poemas capaces de convertir la derrota en victoria: se titula Para Ponernos Nombre y cada vez que lo leo pienso con emoción en mis abuelos entonces, derrotados pero juntos en un mundo en blanco y negro. Ellos, que también descubrieron que «era hermoso atardecer unidos», perdieron varias guerras pero ese poema casi épico siempre me recuerda que lucharon por mí: ahora ya no están pero su cariño sí. De Diario Cómplice hoy prefiero esa imaginativa descripción de la ciudad llena de ti que lleva el número XIV. Y está entera mi forma de mirarte dormida en el poema Versión Libre de la Inmortalidad, perteneciente a Las Flores del Frío, Y me conmueve entero aún la historia de una pareja que podrían ser mis padres recogida en Unas cartas de Amor, de Habitaciones Separadas, sí. Y mi poema favorito de Completamente Viernes es y será siempre el titulado Cartas por su ternura expresiva, Y amo principalmente la lucidez del primer poema -todo un credo- de La Intimidad de la Serpiente¿ Versos repletos de verdad que son también un punto de partida para la reflexión. Personalmente cuando pienso en cuál es la pulpa de la poesía llego siempre a la misma conclusión. Según mi experiencia lectora y creadora si en el ensayo cobra importancia el pensamiento y en la novela esa importancia recae en gran medida en la imaginación, para que la poesía funcione, emocione y hasta conmocione tiene que ser verdad, pues sin verdad se convierte en un acontecimiento estético y ético como mucho brillante: calor que se disipa. Quienes hemos sentido alguna vez al leer un poema cómo éste nos iba afilando la intuición y cómo nos regalaba precisión lingüística y vital, sabemos intuitivamente donde está esa verdad vitalista que sintoniza el cuerpo con el alma, esa verdad serena que invita al intimismo, la verdad desgarrada que ayuda a extraer principios de la tristeza, la que convierte el grito en música y la muerte en leyenda. Sí, tenemos claro que esa poesía repleta de verdad que es capaz de tocar un nervio de nuestra alma no engaña y no calla, y de ahí su grandeza. El derecho y la política nos dicen que no existe la verdad; que todo es argumentable. Por eso sé que en esta sociedad pragmática y escéptica hablar sobre la verdad supone invocar algo peligroso, dañino, algo sospechoso porque atenta contra la ceremonia de la confusión y el tinglado de apariencia que nos hemos montado. Pero por eso, como nos enseña también la obra de Luis García Montero, hoy el poeta parece tener la misión de bajarse del carro del descreimiento circundante para intentar propagar su verdad emocional. Y es que ya nadie cree como Gabriel Celaya que la poesía pueda cambiar el mundo, pero acaso la poesía exenta de verdad sí que puede hacerlo: puede desfigurar el mundo¿ Ojalá este libro recopilatorio les guste tanto como a mí.