Los primeros robots espía ya se pueden adquirir en Estados Unidos por 200 euros

Los científicos e ingenieros que trabajan en robótica construyen modelos cada vez más avanzados, muchos de los cuales ayudan a mejorar la calidad de vida de los seres humanos. Así, en Estados Unidos y Japón se utilizan para proporcionar información, cuidar niños, acompañar ancianos, colaborar en labores de rescate o realizar trabajos domésticos como cotar el césped, limpiar ventanas o aspirar el suelo. Aunque este robot sería de utilidad para que los padres se comuniquen con sus hijos, también podría colocarse escondido en determinado lugar y usarse para observar lo que hacen las personas que estén allí y enviar las imágenes a una central. En Consumer Electronics Show, una feria que acaba de celebrarse en Las Vegas, se han presentado tres modelos de robot espía. El primero de ellos, R2-D2, conocido por la serie de películas sobre «La guerra de las galaxias», tiene funciones de espionaje, aunque de momento sólo se destina a ser utilizado en el hogar. Está dotado de control remoto y dispone de sensores que evita que choque contra los muebles o las paredes y cuenta con un programa de audio y video en tiempo real y una cámara web con zoom, que puede ser usada como un teléfono de internet, cámara digital y cámara de video capaz de transmitir imágenes a cualquier ordenador de forma inalámbrica. El último, mucho más sofisticado, es un helicóptero de vigilancia, estable y veloz, equipado con tecnología de imágenes de alta resolución capaz de enviarlas en directo a una pantalla de poco más de dos pulgadas o almacenarlas en su memoria. Mide 36 centímetros de largo, pesa unos 80 gramos y su precio aproximado es de unos 180 euros, aunque no estará disponible en Estados Unidos hasta finales de año.