La familia del profesor agredido exige responsabilidades a los médicos

La familia de Jesús Neira, el hombre que entró en coma después de recibir una paliza el pasado 2 de agosto al tratar de defender a una mujer que estaba siendo agredida por su novio, «exigirá responsabilidades» por las «posibles negligencias médicas», puesto que en ningún momento fue sometido a pruebas en la cabeza. Según ha explicado el portavoz de la familia, Jesús Castro, desde el día que sufrió la agresión hasta el día 6 que entró en coma, Neira pasó por tres hospitales «y en ningún centro detectaron la posibilidad de estas consecuencias, ni le hicieron ningún TAC o escáner, a pesar de que tenía un golpe tremendo en el cerebro». El mismo domingo por la tarde Neira comenzó a sentirse mucho peor y regresó a la clínica. Volvió a casa para empeorar aún más, regresar el martes a urgencias y quedar ingresado tras sufrir un derrame cerebral provocado por las lesiones que le causaron los golpes recibidos tres días antes. Isabel Cepeda, esposa de Jesús Neira, considera que deberían haber prestado más atención a los golpes en la cabeza porque, según ha explicado, Jesús recibe un tratamiento con anticoagulantes por problemas del corazón, lo que agrava los problemas en el cerebro. Sin embargo, la mujer del agredido afirma que en los tres hospitales que visitaron se centraron exclusivamente en los golpes de la espalda y en las contusiones de la cara, sin tener en cuenta el impacto recibido en la cabeza. En coma Jesús Neira permanece en coma, muy grave, y tiene 39 de fiebre «por el encharcamiento de los pulmones», ha explicado su mujer, que cree además que le tendrán que practicar una traqueotomía en los próximas días para aliviar los problemas de respiración. Isabel Cepeda ha confesado que afronta esta situación con «estupor, miedo e indignación», aunque reconoce que no pierde la esperanza. «Jesús es un caballero -ha afirmado Cepeda al recordar la actuación de su marido cuando intentó detener a un hombre en el momento en que le propinaba una paliza a su pareja-; el honor y la dignidad van por delante de sus actuaciones, eso es lo que les enseña a nuestros hijos y es lo que ha demostrado». Asegura además que «no se arrepintió de lo que hizo, estaba muy contento y le parecía que había hecho poco porque el agresor no fue a la cárcel». Actitud hostil La mujer de Jesús espera que la justicia actúe rápidamente y lamenta que la mujer del agresor no haya denunciado y, más aún, que «ni siquiera le haya dado las gracias» a su marido cuando se encontraron el pasado domingo en la vista: «sucedió más bien lo contrario, su actitud fue hostil y desagradable». El portavoz de la familia ha recalcado que exigirán la «inmediata detención del agresor» porque las noticias que tienen es que «se encuentra en libertad y sólo tiene que personarse el 1 y el 15 de cada mes en los juzgados».