Diario de León

Operación Da Vinci a cuatro brazos

La cirugía robótica crece en los quirófanos del hospital San Juan de Dios con la incorporación del aparato que permite operar con más precisión y aminora los efectos secundarios para los pacientes en cáncer de próstata, riñón y vejiga

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León

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La prostatectomía radical más avanzada ya se aplica en los quirófanos de San Juan de Dios. La llegada del robot Da Vinci X ha permitido implantar el procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo para operar a pacientes con cáncer de próstata.

La extirpación de la glándula prostática en pacientes con cáncer infiltrante y no metastásico es el primer tipo de intervención que se realiza en el centro con el Da Vinci, un gigante de cuatro brazos que parecen patas de araña. Urología y Cirugía General son las primeras especialidades en manejar la nueva herramienta quirúrgica.

En un futuro próximo, como ya se hace en el Caule, se incorporarán intervenciones de otras especialidades como Digestivo, Ginecología, Cirugía Torácica, Otorrinolaringología y Cirugía Pediátrica.

«En el campo de la cistectomía, podremos hacer vejigas nuevas intracorpóreamente», apunta Miguel Ángel Alonso Prieto, especialista en Urología y Cirugía Endoscópica del Hospital San Juan de Dios de León.

Da Vinci mejora la precisión y da más comoidad al cirujano y más calidad de vida a los pacientes

Este médico, que está acreditado como formador de otros urólogos, señala que el robot ofrece un mayor grado de precisión y rango de movimientos y elimina el temblor físico. Además, desde los monitores se visualiza de forma real y tridimensional el campo operatorio; se accede con más facilidad a las zonas anatómicas más profundas con mayor radicalidad de la extirpación y menos probabilidades de error.

El cirujano ‘opera’ a distancia. Son sus manos, en coordinación con los pies, las que dirigen los cuatro brazos puesto que el Da Vinci, como todos los equipos de cirugía robótica que hay en el mercado, no están diseñados para ser programados y operar por su cuenta. El cirujano opera sentado.

«Ofrece más comodidad y por tanto mejores condiciones para desarrollar la intervención», señala Alonso Prieto. Unas ventajas quirúrgicas de las que también se beneficia el paciente. La recuperación es menos dolorosa y más rápida, hay menos riesgo de complicaciones e infecciones.

Los efectos secundarios sobre la potencia sexual y el control del esfínter urinario, casi inevitables en las operaciones manuales, se aminoran con esta tecnología. La preservación de los nervios, siempre que sea posible, es más fácil de garantizar con la nueva forma de operar el cáncer de próstata. Aunque no eliminan la posibilidad de incontinencia y de impotencia, se baja el riesgo», subraya.

«No basta con curar el cáncer», según remarca un profesional que también trabajará en San Juan de Dios mano a mano con el doctor Miguel García Sanz, experto en cirugía de prolapso o caída del suelo pélvico. En el quirófano con Da Vinci siempre hay dos cirujanos, el que opera y un segundo por si se produce alguna complicación.E

Las intervenciones de Urología supondrán el 70 por ciento de las que se realicen con el robot, con la prostatectomía radical a la cabeza. «Es el cáncer con mayor prevalencia entre los varones», puntualiza Alonso Prieto. De igual modo, se utilizará en algunas cirugías colorrectales, ginecológicas (sobre todo en la histerectomía radical por cáncer de cérvix o endometrio), pediátricas, cardiovasculares y otorrinolaringológicas.

«El Da Vinci es el salto definitivo a la cirugía mínimamente invasiva. Poco a poco se irán incorporando plataformas más baratas que de modo que se va a democratizar este procedimiento», añade el especialista.

La incorporación de esta tecnología modifica el aprendizaje de la especialidad para el personal MIR y los métodos de cada operación. «El robot es un camnio respecto a la cirugía abierta, aunque no tanto si tienes experiencia en cirugía laparoscópica», subraya este urólogo y también especialista en cirugía endoscópica que se formó en Estraburgo ya hace varios años para el manejo del Da Vinci.

«No hay marcha atrás, no creo que vuelva a operar una próstata con cirugía abierta. Los nuevos residentes ya salen formados para operar con el Da Vinci», asegura el doctor Miguel Ángel Alonso Prieto.

Con el nuevo sistema de Abex Excelencia Robótica, el centro médico-quirúrgico se suma los más de 120 hospitales españoles donde médicos y pacientes ya forman parte de la élite mundial con acceso a la cirugía robótica.

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