Aumentan las consultas de divorcio y para rebajar pensiones alimenticias

Las consultas para iniciar el divorcio, para pedir una rebaja o extinción de las pensiones alimenticias de los hijos y de las compensaciones económicas a las exparejas han aumentado sustancialmente durante los dos meses de confinamiento, según confirman los abogados leoneses. Es más, los juzgados de Familia se preparan para recibir una avalancha de demandas de separación y modificación de medidas de los convenios reguladores.

De momento se han registrado una treintena de casos, pero el dato aún no es significativo porque pueden haberse presentado muchos más sin estar todavía registrados por la actual situación judicial. El magistrado del juzgado de Primera Instancia número 10, José Enrique García Presa, cree que «un efecto colateral del confinamiento» será, presumiblemente, «el incremento de las crisis conyugales por una convivencia de 24 horas». Recuerda que las rupturas se disparan tras los periodos vacacionales por la convivencia más intensa de lo habitual, así que ante las circunstancias del estado de alarma, con un encierro obligado, hijos menores sin colegio y problemas económicos nuevos, «la ansiedad puede generar demandas de divorcio y peticiones de rebaja de las cargas económicas».

También prevé un aluvión de procesos para solicitar una compensación de tiempo por parte de los padres y las madres divorciadas que se han visto desprovistos de la compañía de sus hijos durante este tiempo. El Gobierno habilitó un procedimiento especial para resolver con prioridad la solicitud de mermas en las pensiones a los hijos derivadas de ertes y pérdidas de trabajo, y para compensar las semanas de visita a los menores que no se hayan podido disfrutar, pero García Presa opina que ese real decreto 16/20 de 28 de abril «no tiene mucho sentido, porque esos procedimientos ya existían y en Familia todo es urgente».

Por su parte, la presidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia (Aeafa), María Dolores Lozano, también cree que no basta con que a un proceso se le ponga la etiqueta de ‘urgente’ si no se dispone de medios y coincide en que el confinamiento está provocando una «situación parecida» a las vacaciones de verano, Navidad o Semana Santa, que es cuando «las parejas conviven más tiempo» y cuando se «suele producir un repunte importante de las rupturas». Habrá que esperar hasta junio para conocer si el informe del CGPJ constata el incremento.