Tres municipios abren oficina de asesoramiento a preferentistas
Ponferrada, Carracedelo y Bembibre habilitan locales de ayuda.
El local número 20 de los bajos de El Toralín ha sido habilitado para atender a los afectados.
Primero fue Bembibre y ahora también Ponferrada y Carracedelo. Los ayuntamientos de estos tres municipios han habilitado el mismo número de locales para atender las dudas de los afectados por las preferentes bancarias y ayudar a cumplimentar la documentación requerida para iniciar cualquier tipo de acción legal contra la entidad de la que hayan sido víctimas bien con participaciones preferentes, supuestos plazos fijos u obligaciones subordinadas.
El espacio informativo de la capital del Bierzo abrió ayer mismo sus puertas en el número 20 de los bajos del estadio de fútbol El Toralín. Allí, los preferentistas serán atendidos todos los martes y jueves entre las 16.00 y las 20.00 horas. En Bembibre, el local destinado a los afectados por estos productos financieros se encuentra en la cuarta planta de la casa consistorial y permanece abierto al público también los martes y jueves de cada semana, pero en este caso entre las 11.00 y las 13.00 horas. En el Bierzo la mayoría fueron emitidos por el Banco Ceiss y se calcula que hay más de 5.000 personas afectadas por dicha entidad. No obstante, también es importante la cifra de preferentistas de Novagalicia —antes Caixa Galicia—, por la fuerte presencia que esta tuvo en la zona.
El último en sumarse a la iniciativa ha sido el Ayuntamiento de Carracedelo que, en colaboración con la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros, ha creado un espacio de información gratuito y desinteresado que ya se ha puesto a disposición de todos aquellos que lo necesiten. Por lo tanto, desde ya mismo, todos y cada uno de los afectados podrán informarse y ser asesorados sobre productos bancarios adquiridos solicitando cita previa en los números de teléfono 619840244 y 983373173 en horario de 10.00 a 14.00 horas y de lunes a viernes. Y es que teniendo en cuenta el volumen de demandas que diariamente soportan los ya de por sí colapsados juzgados ponferradinos, cualquier atención es poca para un problema del que cada día se conocen nuevos perjudicados.