Apoyo unánime de las Cortes al último informe de García Álvarez

Si en algo coincidieron ayer todos los grupos parlamentarios de las Cortes de Castilla y León, fue en resaltar el brillante papel desempeñado por el Procurador del Común, Manuel García Álvarez, a lo largo de sus diez años de mandato. Durante el primer debate del Parlamento autonómico en el nuevo periodo de sesiones, en el que García Alvarez presentó su informe anual correspondiente al pasado año 2003, los procuradores que tomaron la palabra destacaron que en éste, su segundo y último mandato, ha seguido haciendo gala de una gran independiencia e imparcialidad. Tras la presentación del informe, el primero en tomar la palabra fue el procurador por León José María Rodríguez de Francisco, perteneciente al Grupo Mixto, quien si bien criticó a García Álvarez por utilizar eufemismos para referirse a su relación con la Administración autonómica, llegó a proponer que continúe en el cargo sin límite de tiempo, como sucede con otros defensores autonómicos e incluso con el nacional. A continuación intervino el procurador de la UPL y portavoz del Grupo Mixto, Joaquín Otero, quien hizo especial hincapié en la importante labor desempeñada a lo largo de estos años por el actual Procurador del Común, quien ha dado a conocer al conjunto de la comunidad una institución que hasta hace diez años no existía. Otero, quien habló desde su condición de amigo, compañero y alumno de García Álvarez, aseguró que éste ha dejado «muy alto el listón» para el que sea su sucesor. Igualmente el procurador de la UPL agradeció el trato que su formación política siempre ha recibido de esta institución. Tono de despedida En tercer lugar, el portavoz adjunto del PSOE, José María Crespo, también alabó la tarea realizada por García Alvarez de quien, aseguró, se podrá decir que «fue incómodo para el poder y siempre ayudó a las personas». Por su parte, el portavoz popular, José Antonio de Santiago-Juárez apoyó la gestión y trabajo de García Álvarez, que ha contribuido a poner en marcha la institución, a consolidarla, popularizarla y prestigiarla, según informó Efe. Durante el 2003, el Procurador del Común recibió una media de nueve quejas por cada 10.000 habitantes, y dentro de la comunidad los leoneses y segovianos fueron los que acudieron más a este alto comisionado, con trece por cada 10.000; seguidos de los palentinos, con doce, los sorianos con diez, los zamoranos y abulenses con ocho, los burgaleses con siete, los salmantinos con seis y los vallisoletanos con cinco.