Blasco niega toda relación con el presunto cabecilla del desvío de fondos de cooperación

Un billete gigante de 500 euros aguardaba este jueves al exconsejero valenciano de Solidaridad Rafael Blasco a las puertas del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana. Decenas de personas pertenecientes a la coordinadora valenciana de ONGD se han parapetado tras él para exigir la devolución de los fondos desviados por la trama corrupta en el 'caso Cooperación'. Sin embargo, Blasco ha llegado al juzgado a primera hora de la mañana y ha evitado las protestas.

Ya en la sala, el exconsejero encausado por los delitos de prevaricación, malversación y falsedad documental, ha comenzado a declarar. Estaba previsto que conteste las preguntas de todas las partes, excepto las de la Abogacía de la Generalitat Valenciana, a quien intentó apartar del caso como acusación sin éxito.

A preguntas del fiscal Anticorrupción, Vicente Torres, el exconsejero ha dicho que "nunca" le dijo al empresario Augusto César Tauroni (el otro principal acusado en la causa) cómo debía presentase a las convocatorias de proyectos de cooperación, tres de las cuales "ganó" cuando Blasco era consejero. También ha negado "saber nada" sobre la Fundación Cyes (la beneficiada en las ayudas investigadas) antes de que los medios publicaran la información sobr el 'caso Cooperación'. Blasco ha negado tener "ninguna relación de amistad, personal o de confianza" con Tauroni, a pesar de que sí ha reconocido que lo conoce "desde hace 13 o 14 años" y que el empresario ha sido "proveedor" en diversas consejerías que él ha comandado. Visiblemente nervioso y titubeante, las respuestas hasta ahora más frecuentes de Blasco han sido "no recuerdo" y "no lo sé".