El enfado de Montero y Belarra
Las ministras Irene Montero y Ione Belarra no asistirán el domingo a la Asamblea que En Comú Podem celebrará en Barcelona, como sí harán, en cambio, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la de Generalitat valenciana, Mónica Oltra, o el ministro de Consumo y coordinador de Izquierda Unida, Alberto Garzón. La principal representación de Podemos en la cita recaerá en Lilith Verstrynge, secretaria de Organización de la formación.
Esta ausencia, causada por motivos de agenda, como justifican desde los comunes, sería anecdótica si no fuera por el terremoto que estos días sacude el espacio político situado a la izquierda del PSOE.
Belarra y Montero ya quedaron fuera de la foto que protagonizaron el sábado pasado en Valencia Díaz y Oltra junto a Mónica García (Más Madrid), Ada Colau (En Comú) y Fátima Hamed (MDyC). No estaban invitadas, pero el acto disparó las expectativas en torno a una eventual unión de estas fuerzas en un «frente amplio» para las próximas generales.
Podemos, pese a sus recelos iniciales, acabó calificando el lunes aquella instantánea como «un antes y un después» en la construcción de una plataforma electoral y se apresuró a señalar que la unidad era «el camino a seguir».
La portavoz de los comunes en el Congreso, Aina Vidal, quitó hierro este martes a estas ausencias y aclaró que las ministras de Podemos estaban «invitadísimas» a la Asamblea.
«Son nuestras compañeras de viaje y, por tanto, como no podía ser de otra manera están invitadas. Otra cosa es que por sus agendas puedan permitirse ir a Barcelona porque entendemos que tienen muchas otras cuestiones», explicó. Posteriormente, fuentes de Podemos confirmaron que Belarra enviará un vídeo «de apoyo» que se emitirá en el cierre del evento.
Pero en Podemos existe cierto temor a quedar relegados en un futuro frente político ya que consideran que Díaz actúa de forma autónoma al no formar parte del organigrama del partido. El portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, envió un mensaje de calma y recordó que «es la vicepresidenta la que tiene que tomar las decisiones».
«Nosotros pensamos que el acto del sábado ha ilusionado a mucha gente. Permite abrir la puerta a una posibilidad, que será difícil de conseguir, que se unan Podemos, Más País, Compromís, IU y los comunes», zanjó.