Cinco alcaldes piden a Patrimonio que autorice la ampliación del puente

Los municipios de Villasabariego, Villaturiel, Valdefresno, Mansilla de las Mulas y Mansilla Mayor celebraron ayer una reunión en la que acordaron unir sus fuerzas para convencer a Patrimonio de que dé su visto bueno al proyecto de ampliación del puente romano de Puente Villarente, redactado por el Gobierno y que ha sido rechazado por la comisión de Patrimonio de la Junta por considerar que la ampliación de su calzada con una losa «no respeta la estética ni la esencia del puente histórico, que se remonta al siglo XV, aunque haya sufrido varios arreglos posteriores». Los alcaldes no están dispuestos a perder una subvención del Ministerio de Fomento de 2.850.000 euros para ampliar el peligroso viaducto de Puente Villarente ya que llevan más de cincuenta años reivindicando una solución a ese punto negro del Camino de Santiago, que se ha cobrado numerosas víctimas por su estrechez y por la densidad del tráfico de vehículos y viandantes que registra a diario. Los regidores aseguran que no permitirán que la Junta «bloquee los trabajos con la excusa de que hay que conservar íntegramente la estética histórica del paso sobre el río Porma». El primer paso lo darán los alcaldes del PP, que se han comprometido a forzar una entrevista con el delegado territorial de la Junta, Eduardo Fernández, para que medie en el conflicto. No obstante, están dispuestos «a llegar dónde sea». Incluso si hace falta se encadenarán al puente, movilizarán a los 7.000 vecinos de la zona o se manifestarán ante la Junta. «No estamos dispuestos -puntualiza el regidor de Villaturiel, Valentín Martínez- a perder esa subvención de casi tres millones de euros por una disputa claramente política entre la Junta y el Gobierno central. Si quieren defender el patrimonio del Camino de Santiago, el verdadero patrimonio de la Ruta son los peregrinos y ese puente constituye un peligro». Según ha podido saber este periódico, la comisión de Patrimonio de la Junta no autorizó el pasado mes de marzo el proyecto de reforma del puente de Villarente «porque la idea es conservar el legado romano y medieval y no transformar totalmente el puente». La comisión sugirió al Ministerio de Fomento, el organismo que financia y ha redactado el proyecto, que es mejor ejecutar un nuevo puente para la circulación de vehículos y reservar el paso histórico como pasarela peatonal sobre el río Porma. No obstante, a juicio de los alcaldes de la zona, «el tema es muy serio» y temen que por disputas entre administraciones vayan a resultar perjudicados. También recuerdan que el puente romano, de unos 150 metros de longitud, ha sufrido varias modificaciones a lo largo de los años. La losa central se recreció con hormigón y bajo el paso se vislumbran todo tipo de cables y vigas de hierro para reforzar el viaducto, muy dañado por las crecidas del río y por su uso. «¿Qué quiere decirnos Patrimonio, qué valoran más unas piedras, que se van a conservar, que la integridad y seguridad de los peregrinos?», se pregunta Martínez. También el regidor directamente afectado por la infraestructura, el socialista Jesús García, asegura que el proyecto de Fomento es «respetuoso, ya que sólo plantea ensanchar la calzada central con una losa de hormigón que permita la circulación de los vehículos cómodamente y el paso de viandantes, además de embellecerlo con una buena iluminación». En la reunión de ayer se expuso, además, que «dentro del plan de Fomento para mejorar todos los puentes del Camino de Santiago sólo queda el de Puente Villarente por la oposición a conceder el permiso de la Junta. Incluso la confederación ha dicho que sí», lamentan.