Arrancan las obras del conservatorio en la fecha en la que estaba previsto terminarlo

En mayo de 2017, tras intensas jornadas de protesta por parte de la sociedad leonesa ante la propuesta de trasladar las enseñanzas musicales del Conservatorio a los bajos del estadio de fútbol de León, la Junta asumió la parcela ubicada en el barrio de San Mamés —en el linde con La Palomera que ya le había cedido el Ayuntamiento en 2008— para la construcción de un nuevo edificio y abandonar las instalaciones de la Diputación en la calle Santa Nonia. Ese mismo mes, el por aquel entonces consejero de Educación, Fernando Rey, anunció que el nuevo Conservatorio estaría construido en agosto de 2021, a fin de poder dotarlo de contenido y que estuviese preparado para el inicio del curso 2021/2022. El proceso se ha dilatado tanto que, finalmente, ayer, se iniciaron los trabajos en la parcela, se limpiaron las malas hierbas que se habían adueñado de los 8.725 metros cuadrados destinados a las nuevas instalaciones y se ha comenzado a acotar el terreno para iniciar las obras, además de instalar un reluciente cartel informativo de las actuaciones.

El plazo de la adjudicación para la construcción del nuevo conservatorio es de 20 meses, con lo que si no hay ningún retraso más y no surgen imprevistos, el nuevo edificio abrirá sus puertas ya de cara al curso 2023/2024, ya que el fin de la ejecución concluiría en diciembre de 2022. El pasado mes de abril, fue cuando se adjudicó definitivamente la obra por un importe de 7,8 millones de euros.

El nuevo Conservatorio en el que se impartirán las enseñanzas musicales de León ocupará 4.244 metros cuadrados de los 8.725 de los que dispone la parcela, que tiene forma de lanza. Entre los 2.839 metros cuadrados destinados a las zonas útiles se repartirán un auditorio con 400 butacas más dos camerinos y un almacén y 60 aulas: siete de formación general, 32 de enseñanzas musicales, tres de música de cámara, una de contrabajo, otra de percusión y otra más de violonchelo, ocho cabinas, cuatro cabinas de percusión, un aula de orquesta y otra más de coro. El estudio de arquitectos encargado del diseño, explicó que el edificio leonés, de una sola planta, sería un espacio «hermético y cerrado» para conseguir «una gran caja que intenta cerrar el mundo de la música al ruidoso mundo exterior. Será una isla para la música», apuntó el arquitecto Primitivo González.

Catas arqueológicas

El exterior del edificio será monocolor y aunque en su imagen a la calle aparecerá como un espacio compacto, por dentro será «espacioso y luminoso», estructurado en dos calles o dos direcciones, a partir de las cuales se ordenará todo el recinto y para garantizar un espacio geométricamente ordenado y más funcional.

Fue en noviembre de 2017 cuando, cumpliendo con las exigencias del proyecto, se realizaron las catas arqueológicas en la parcela, que se encuentra ubicado en el entorno de Vegazana con lo que era preciso descartar la existencia de restos romanos. Después, hasta el día de ayer, el movimiento en los terrenos se paró.

A la espera de que se construya el nuevo Conservatorio, los alumnos de enseñanzas musicales continuarán con sus clases en el edificio propiedad de la Diputación provincial en la calle Santa Nonia. En 2007 la Junta de Castilla y León asumió la gestión de estas enseñanzas y, ante la falta de un edificio propio, la institución autonómica firmó un convenio con la provincial por la que abonaba 300.000 euros anuales por la cesión del edificio en el centro de León. Sin embargo, un nuevo acuerdo a principios de 2018, suprimió esta aportación económica a cambio de contraprestaciones en los colegios rurales. El actual equipo de gobierno en el Palacio de los Guzmanes ya ha anunciado que intentará renegociar el acuerdo, aunque el convenio vigente será efectivo para este curso y el próximo, con lo que, a falta de algún contratiempo en la obra, no será necesario ampliarlo.

A pesar de que el clamor social consiguió evitar que las clases se trasladasen al campo de fútbol, no han conseguido hacer retroceder a la Junta en el tamaño del edificio. Desde la Plataforma en Defensa de un Conservatorio Digno, surgida ante la posibilidad del movimiento a los bajos del Reino de León, siempre han insistido en que las nuevas instalaciones se quedarán pequeñas antes de que el centro abra sus puertas en San Mames, ante la alta demanda de estos estudios. En este sentido, la actual consejera de Educación, Rocío Lucas, siempre ha incidido en que no habrá más espacio, que el proyectado es un 33% más grande que el actual en Santa Nonia, y que la oferta musical está cubierta, además de recordar la existencia de otros dos conservatorios en la provincia, el de Ponferrada y el de Astorga.