Arregla electrodomésticos con una licencia falsa y le piden tres años

El juzgado de lo Penal número 1 de León pasará vista oral el próximo 15 de enero a las 10.30 horas a la acusación de un delito continuado de estafa que pesa sobre un varón que se hizo pasar por titular de una empresa de venta de ropa de trabajo que no era de su propiedad.

Sin autorización del matrimonio que regentaba el negocio legalmente, utilizó los servicios de un agente certificado de Google propietario de una web de asistencia técnica de electrodomésticos, expidió facturas por servicios prestados que nunca existieron. Así emitió dos facturas por valor de casi 3.000 euros que fueron abonadas al acusado en su totalidad.  

La Junta de Castilla y León recibió numerosas reclamaciones por defectos en la reparación de electrodomésticos que figuraban a nombre de la empresa mencionada, siendo en realidad el autor el acusado. Para él se pide una pena de tres años de cárcel.  

La estafa “precedente o concurrente” a la defraudación: Es decir, que lo primero que tiene que suceder para que haya un delito de estafa, es que una persona engañe a otra. El engaño puede consistir, por ejemplo, en usar nombre fingido, atribuirse poder, influencia o cualidades supuestas, aparentar bienes, o saldo en una cuenta corriente, o crear una empresa imaginaria. Pero no basta con cualquier engaño, sino que: Dicho engaño ha de ser «bastante», es decir, suficiente y proporcional, según la ley.