Entra a robar en ocho casas de Pinilla a cara descubierta y le identifican por las redes sociales

El barrio de Pinilla se siente «indignado» por las andanzas desde hace varias semanas de un posible caco que accede a los patios de las viviendas unifamiliares construidas en los años sesenta para apoderarse de lo que encuentra, desde hamacas a utensilios, ropa colgada, juguetes y hasta una bombona de gas.

Según relatan los propios afectados, el intruso salta las vallas de las «casitas» que caracterizan este típico barrio obrero para entrar a los patios y jardines , normalmente, aprovechando la penumbra, y llevarse lo que encuentra a su paso. Le atribuyen, y así lo han denunciado a la policía, sustracciones en las calles Sil, Jamuz, Sella y Tremor.

La primera vivienda en la que supuestamente entró era propiedad de un feriante que posee un puesto en el Rastro leonés, al que le sustrajo cuatro cajas de ropa que almacenaba para vender y que había apilado en el patio de su casa. Los robos se fueron a partir de ahí multiplicando y los vecinos aluden a que en una misma noche el supuesto ladrón se atrevió incluso a cruzar la valla de tres viviendas para apoderarse de un botín superior.

Normalmente, el hombre accedía con un pasamontañas y paso ligero, pero supuestamente creen que ahora se ha envalentonado, ya que en la última vivienda unifamiliar que ‘asaltó’ se atrevió a introducirse en el garaje y a cara descubierta. Lo que no imaginaba el presunto autor de los robos es que en ese garaje, su dueña había colocado una cámara de grabación por seguridad que le captó de pleno cuando entraba de forma sigilosa amparado por la oscuridad y moviéndose en zig-zag casi de puntillas.

El miedo es que sus andanzas acaben de forma poco agradable con un altercado serio si se encuentra con alguno de los moradores, ya que suele actuar impunemente cuando algunos propietarios están en sus casas.

La Policía está sobre la pista, ya que, al parecer, la colaboración ciudadana ha logrado identificar a un varón de mediana edad y pelo oscuro.