El Gobierno y la Junta se comprometen a estudiar una revisión del plan Oeste

El Plan Oeste se encomendó a aquel Consejo de Ministros que Zapatero escenificó en León como el revulsivo para un territorio en caída demográfica. Pero casi 20 años después de aquel julio de 2004, las medidas no llegaron o, en el mejor de los casos, se quedaron cortas, y la tendencia de pérdida de población y declive de los indicadores económicos se ha agudizado. Desde este horizonte, el colectivo León Propone ha enviado una carta abierta al Gobierno y la Junta en la que les insiste en que «se requiere el trabajo de ambos gobiernos en un plan de medidas coordinadas para la Región Leonesa, empezando quizá por revisar y materializar el Plan para el Oeste de España, como se ha hecho con el Plan para Soria, aprobados ambos durante el gobierno del presidente Zapatero». 

El grito, en el que se insiste en que «es imprescindible y urgente adoptar medidas efectivas capaces de revertir la aguda crisis económica y poblacional de la Región Leonesa», ha tenido una respuesta de cortesía por parte de ambas instituciones. Sin mayor compromiso, el Ministerio de Presidencia apunta que, «una vez examinado su contenido, la sugerencia ha sido trasladada a la Presidencia del Gobierno». En términos similares, la Dirección General del Territorio, encuadrada en la Consejería de Fomento de la Junta, agradece la propuesta, de la cual toma «nota» y proceden «a estudiar». «Así mismo le comunico que se está elaborando una estrategia para la dinamización demográfica que dará respuesta a todas las cuestiones a las que se hace referencia», se apostilla.

Aquel Plan del Oeste apuntaba 115 medidas, cuantificadas en 4.000 millones de inversión. Entre ellas hay realidades como la llegada del AVE, aunque sólo hasta León por ahora, el Incibe o la ampliación del aeropuerto, pero quedan déficits como la León-Valladolid, el parque temático del motor de La Bañeza, los parques agroalimentarios y otros muchos. Sobre esta base, la asociación León Propone se centra en reclamar sobre una línea que no se desarrolló entonces: los «estímulos especiales a las inversiones empresariales privadas», además de «inversiones públicas tractoras de tejido empresarial, incluida la iniciativa pública directa en la actividad económica».

El colectivo incide en la necesidad de «beneficios tributarios en las cotizaciones a la Seguridad Social y para las empresas que se asienten en pequeñas localidades». Esta iniciativa, que ya plantearon «al proyecto de Ley del Ecosistema de Empresas Emergentes y que no fueron siquiera debatidas, deberían incorporarse a la futura Ley de Industria», como reseña León Propone.

El listado de planteamiento abunda en que Gobierno y Junta deben aplicar «también bonificaciones fiscales para la población que resida de manera efectiva en pueblos pequeños; garantía de servicios, educativos, sanitarios, tecnológicos y de movilidad para las personas que reside en ellos; imponer retornos concretos de los beneficios de las grandes instalaciones de producción de energía limpia allí donde se asientan, como la creación de comunidades energéticas para las localidades donde se instalan y garantías suficientes para su retirada cuando se agote su vida útil, para que no suceda como con las minas y escombreras de carbón abandonadas; ejecutar la conexión por carretera entre Puebla de Sanabria y Bragança; reabrir la ruta férrea Ruta de la Plata, ampliada...».

Junto con estas actuaciones, se recuerda que se han perdido proyectos de manera reciente como la Agencia Espacial Española que tienen que «ser sustituidos por otros capaces de generar un ecosistema de desarrollo sostenible que asiente población». «Decisiones como las tomadas recientemente en favor de Teruel, Soria o Jaén, deben igualmente adoptarse para las provincias del oeste del país, en especial de Zamora, León y Salamanca, que, reiteramos, son las que más población han perdido y seguirán perdiendo en los próximos años», conceden desde León Propone, definida como una asociación «independiente y no alineada con ningún partido político, nacida de la sociedad civil leonesa con el objetivo de promover el progreso económico, demográfico, social y cultural de la región leonesa, desde la lealtad al conjunto de España y el respeto al marco constitucional y a las instituciones del estado y de la Unión Europea».

Su radiografía asienta que «el viejo Reino de León, cuna del parlamentarismo, de la defensa de los derechos de la mujer, de la libertad religiosa o del Derecho Internacional, no sólo sufre el olvido de su legado histórico, sino una auténtica ‘demotanasia’». El concepto lo describe León Propone: «la muerte demográfica provocada por las políticas públicas de concentración de la actividad empresarial en determinadas regiones en detrimento del resto, desde al menos los últimos setenta años».