La guerra de aranceles y el nuevo marco del 'Brexit' ponen en jaque un negocio de 225 M€

La inestabilidad global amenaza a los intercambios comerciales entre países desde hace tiempo, pero se agrava en las últimas semanas. La situación tiene una importante incidencia en las crecientes exportaciones de las empresas de la provincia, que frente a la tendencia decreciente generalizada siguen al alza. O lo han hecho al menos hasta el año pasado, ya que buena parte de estas ventas correspondían a los aerogeneradores de Vestas, ahora desaparecidos de la economía leonesa. Un fuerte impulso ha supuesto también la decisión del grupo Inditex de domiciliar en su centro logístico de León la facturación mundial de su línea de ropa masculina. Lo que reduce sustancialmente el volumen de negocio real de las empresas leonesas con el exterior, y hace depender buena parte de estas cifras de decisiones que, como se ha demostrado en el caso de la eólica danesa, se toman al margen de los intereses de la provincia.

En todo caso, teniendo sólo en cuenta los vaivenes del brexit y las amenazas arancelarias del gobierno de Donald Trump, buena parte del negocio de los sectores más dinámicos de las empresas radicadas en León que tienen una parte importante de su negocio en el exterior está en juego. Lo están la pizarra, los productos de hierro y acero, los químicos y farmacéuticos y el sector agroalimentario. Y, sobre todo, la posibilidad de seguir creciendo en dos importantes mercados potenciales.

Las cifras de comercio exterior de 2018 señalan que los productos elaborados en León vendieron 113,5 millones de euros a Gran Bretaña, y más de 111 millones a Estados Unidos. En este último caso las decisiones del gobierno Trump sobre aranceles (pendientes del dictamen de la Organización Mundial del Comercio) afectarán sobre todo a los productos agroalimentarios y textiles, en lo que afecta a las exportaciones leonesas.

De los 111 millones exportados el año pasado más de 31 millones correspondieron a grupos electrógenos, casi 29 millones a árboles de transmisión y unos 14 millones a ropa masculina. Les siguen los motores y máquinas motrices y, muy de cerca, los productos farmacéuticos, más de 12 millones vendidos. Casi 7 millones son hilos de cable eléctrico y menos de 4 los transformadores eléctricos. Sólo el vino leonés supone ya un negocio con EE UU de casi 2 millones de euros, el principal producto alimentario exportado.

En el caso del brexit, la posibilidad reabierta en los últimos días de una salida no negociada afectaría tanto al ritmo de crecimiento de la economía británica como a las nuevas condiciones de compra y venta de productos con España. Los sectores agroalimentario y químico estarían entre los más afectados, según el análisis realizado por José Luis Placer, catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universidad de León.

Entre el mercado estadounidense y el británico las empresas exportadoras leonesas sumaron el año pasado unos 225 millones de euros, lo que supone un 13% de los 1.759 millones de euros con los que el mercado exterior leonés cerró 2018 con un nuevo récord.

Unas cifras que este año sufrirán una fuerte corrección al no contar con las millonarias ventas al exterior de Vestas, pero que siguen representando una de las principales fuentes de crecimiento del sector empresarial leonés. Ni Gran Bretaña ni EE UU son sus principales mercados, pero sí dos de los que más han crecido en los últimos años, y que suponen al fin un importante volumen de negocio.